Este miércoles se conoció la condena en contra de Gustavo Enrique Bejarano, el mayordomo que estuvo al servicio del exembajador Fernando Sanclemente y de la finca de su propiedad, donde la Fiscalía encontró tres laboratorios para el procesamiento de cocaína. Bejarano fue condenado a 10 años y 10 meses de prisión, por aceptar responsabilidad.

Sin embargo, un colega de Bejarano, también mayordomo de la llamada “narcofinca” está por firmar un principio de oportunidad con la Fiscalía. No solo aceptará que conoció bien la red narcotraficante que funcionaba en sus narices, sino que será testigo de la Fiscalía en el proceso contra el exembajador Sanclemente, quien fue su jefe por varios años.

La defensa de los mayordomos habló con SEMANA y reveló que su cliente entregó pruebas, datos y declaraciones que concluyen lo que reveló hace un año cuando presentó la matriz de colaboración: que el exembajador de Colombia en Uruguay sabía que en su propiedad funcionaba un complejo cocalero.

“El testigo más importante en este proceso es el señor Laureano Martínez. La Fiscalía está comprometida para un principio de oportunidad que inclusive en estos próximos días tendrá que hacerse efectivo… Es un principio de oportunidad muy complicado por los actores que participaron en este proceso, inclusive se mencionó al Clan del Golfo”, dijo el abogado Víctor Muñoz, abogado de los mayordomos.

La Fiscalía aseguró que el mayordomo que fue condenado reconoció ser el encargado de permitir la construcción de los laboratorios, la entrada de personas, vehículos e incluso dar alojamiento a quienes se dedicaron a elaborar las sustancias ilícitas en la finca de propiedad del exembajador y que fue objeto de extinción de dominio.

“En ese sentido, una juez especializada de Cundinamarca condenó a Bejarano Romero a 10 años y 10 meses de prisión, y lo declaró responsable de los delitos de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes; tráfico de sustancias para el procesamiento de narcóticos; y concierto para delinquir”, dijo el fiscal del caso en la audiencia que legalizó el acuerdo firmado.

La defensa del segundo mayordomo, el que espera convertirse en testigo, aseguró que las condiciones y la información que entregó su cliente siguen vigentes, por lo cual le piden a la Fiscalía concretar la construcción del principio de oportunidad y avanzar con prontitud en el proceso.

“Lo que hay que asegurar acá es que la Fiscalía está haciendo su trabajo, las averiguaciones y la indagación. ¿Por qué se ha tomado tanto tiempo? Porque toda la información que ha dado mi cliente ha sido verídica y ha sido tanta que efectivamente las labores de verificación por parte de la policía judicial y el CTI de la Fiscalía son muy largas”, dijo Muñoz.

Este mayordomo, Laureano Martínez, espera concretar su proceso de colaboración y en propósito, explicó en detalle que mantiene su versión inicial, que el exembajador Sanclemente, su exjefe, sabía perfectamente lo que ocurría en esta finca ubicada en el municipio de Guasca en el departamento de Cundinamarca y así se lo contará a la justicia.

“Son testigos identificados en el proceso contra el exembajador Fernando Sanclemente. Nosotros ya hemos adelantado dos interrogatorios donde hemos entregado la información contundente para desarticular esta organización criminal, hemos entregado las pruebas de los laboratorios, las coordenadas y los testimonios”, dijo el abogado.

Otro punto que tiene contra las cuerdas a Sanclemente es la acusación por la destrucción de las pruebas que supuestamente entregaría el mayordomo. La defensa del exembajador aseguró que todo lo dicho por los testigos carece de evidencia y en juicio se defenderán de las acusaciones.