Al saqueo que se dio en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) en el gobierno del presidente Gustavo Petro, cuyos protagonistas principales fueron el exdirector de la entidad Olmedo López y, su exsubdirector Sneyder Pinilla, se suma la pésima gestión de los recursos. A julio de 2024, no habían ejecutado no el 1% del presupuesto.

Esa fue la preocupante alerta que lanzó el contralor General de la República, Carlos Hernán Rodríguez, quien invitó al nuevo director de la UNGRD, Carlos Carrillo, a dar menos discursos y a trabajar en la ejecución de inversiones importantes para mitigar los efectos del fenómeno de La Niña y otros riesgos naturales.

Y es que las cifras son demoledoras, a juicio del contralor Rodríguez, “entre el primero de enero y el 31 de julio de 2024, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), solo ha ejecutado el 0,96% del presupuesto destinado para la atención de riesgos y desastres. Además, en 2023 comprometió, pero no ejecutó $2.13 billones, de los cuales a julio 31 de 2024 solo había ejecutado el 0,02%”.

El Contralor General hizo un llamado al actual director general de la UNGRD, Carlos Carrillo, quien lleva cinco meses en el cargo y aunque ha hecho visibles y públicas muchas de las irregularidades que dejó la administración de su antecesor, Olmedo López, también tiene la fundamental obligación misional de gestionar adecuadamente todos los compromisos, obligaciones, órdenes de proveeduría y contratos que recibió su administración o de reemplazarlos oportunamente, cuando haya decidido terminarlos anticipadamente.

“La inacción o la terminación anticipada de los compromisos adquiridos, está ocasionando incrementos en los riesgos a mitigar y en los daños al erario ya producidos. Buen ejemplo de ello es el caso de los 40 carrotanques adquiridos para transportar agua en La Guajira, con un costo de $47.800 millones, que iniciaron como una proveeduría con presuntos sobrecostos y hoy, 6 meses después, ya son un suministro siniestrado y abandonado que no presta el servicio previsto”, dijo el contralor Rodríguez.

Obras en deuda

La situación no solo tiene que ver con La Guajira o los mentados carrotanques con los que trataron de saquear la UNGRD, obras de primera necesidad, para evitar catástrofes, siguen sin avanzar y no se les ha cumplido a las víctimas de tragedias.

La situación es delicada y va más allá de retirar presupuestos, que “resulta muy preocupante que el actual director general de la UNGRD haya decidido la terminación anticipada de los contratos de obra suscritos en 2022 para la mitigación de riesgos de derrumbes y avalanchas en las cuencas altas de los ríos y quebradas que atraviesan el municipio de Mocoa y que son fundamentales para evitar que suceda una nueva tragedia en dicho municipio”.

Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), se ha dedicado a dar discursos, pero el balance de la Contraloría es preocupante. | Foto: Colprensa

Además, según informaron desde la Contraloría, el actual director de la UNGRD, como lo hizo su antecesor, tampoco ha gestionado lo necesario y suficiente para la pronta y adecuada rehabilitación y reconstrucción de las serias afectaciones producidas por los derrumbes sucedidos en el municipio de Piojó (Atlántico), en septiembre de 2022.

Tampoco se ha logrado solucionar el boquete del Río Cauca en “Caregato”, jurisdicción de San Jacinto del Cauca (Bolívar) y que ocasiona severas inundaciones en varios sectores de La Mojana. La Contraloría ya realizó visita técnica a este sitio e iniciará una indagación preliminar para revisar y evaluar la gestión fiscal de la UNGRD, los consultores, constructores e interventores que han participado en estas actividades y obras.