Mientras que el presidente Gustavo Petro sigue insistiendo en su propuesta del “poder constituyente”, la Corte Constitucional prepara un evento para el próximo 4 de julio con el que se espera conmemorar los 33 años que cumple en vigencia la Constitución de Colombia de 1991.
Hace tan solo unas horas, el mandatario de los colombianos, durante su segundo día de agenda en Estocolmo, Suecia, volvió a referirse a su idea de una constituyente, en medio de una declaración que entregó a una colonia de colombianos que se encuentran en ese país europeo.
“Siempre recuerden esa frase de nuestro himno, es el pueblo el soberano. En la historia que viene de Colombia, todo dependerá de las decisiones del pueblo. Es lo que yo llamo el poder constituyente, que el pueblo decida sobre su propia historia y construya una era de paz, de justicia social y de democracia”, fue las palabras que dio el presidente Gustavo Petro desde Suecia.
Pero mientras esa polémica iniciativa sigue retumbando por el Gobierno Nacional, la Corte Constitucional prepara para este próximo 4 de julio un evento a las 8:00 a.m. en el Centro de Eventos, de la Biblioteca Luis Ángel Arango, en el centro de Bogotá, para conmemorar los 33 años de la Constitución de 1991.
El evento tendrá como objetivo hablar sobre la conquista en los derechos de las mujeres, el principio de separación de funciones del poder público, el control constitucional en el país, su evolución en la jurisprudencia y el impacto que ha generado en el país. Por coyuntura, uno de los temas que llegará a la conmemoración será la idea de reformar esa constitución por iniciativa del gobierno de Gustavo Petro.
El evento estará presidido por el presidente de la Corte Constitucional, el magistrado José Fernando Reyes; y el vicepresidente de Jorge Enrique Ibáñez. Así mismo, tendrá la presencia de influyentes personajes en el proceso Constituyente de esa época como Antonio Navarro Wolf y Humberto de la Calle.
Hay que recordar que la Constitución de 1991 fue el resultado de un largo y complejo proceso constituyente que culminó el 4 de julio de 1991. La reforma arrancó con la creación de un movimiento integrado por docentes, estudiantes, entre otros, quienes promovieron la transformación constitucional a partir de la séptima papeleta, la forma en que se le preguntó a la ciudadanía si considerada necesario una asamblea constitucional para reformar el texto vigente para la época.
De ese ejercicio, salió una Constitución robusta, moderna, que ha sido entendida como un acuerdo de paz y se concibe como un instrumento de concordia y la tranquilidad nacional. Por eso la Corte Constitucional “ha considerado necesario institucionalizar un espacio que tendrá lugar cada 4 de julio para celebrar el día de la Constitución Política, en el que se adelantará un diálogo que permita reflexionar sobre los logros alcanzados y los desafíos que enfrentamos en la garantía y el respeto de los derechos fundamentales, la guarda y la integridad del orden constitucional y del Estado de derecho”.
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