Un día después de que se confirmó que la disidencia de las Farc Dagoberto Ramos asesinó a cinco indígenas en el resguardo nasa de Tacueyó (Cauca), entre ellos a la autoridad Cristina Bautista, el presidente Iván Duque tomó la decisión de aumentar el pie de fuerza y reforzar la presencia del Ejército en Cauca. La noticia se conoció este miércoles en medio del malestar que existe además en el mismo departamento por el asesinato de Flower Trompeta en Corinto. Un joven que habría sido retenido por militares que, supuestamente, metieron una de sus manos en una máquina despulpadora de café y luego lo mataron.
“La Fuerza de Despliegue Rápido número 4 va a traer 2.500 efectivos más de la Fuerza Pública, para cumplir los tres propósitos: control territorial, cerrar las rutas del narcotráfico empleadas por estas organizaciones y desmantelar esas organizaciones”, afirmó el mandatario luego de un Consejo de Seguridad en el norte del Cauca. Según detalló este miércoles el presidente Duque, el despliegue de los nuevos hombres se debe dar en un término de 40 días. En ese momento, los miembros de La Fudra 4 deberán empezar a operar “de la mano de la estructura Atalanta, en la cual también participan todas las fuerzas y donde hay un gran insumo de inteligencia y de capacidad ofensiva de nuestra Policía Nacional”. El despliegue que se efectuará a mediados de diciembre, se suma a los 1.350 nuevos militares que el presidente en agosto precisamente había desplegado en esta región para garantizar la seguridad de las comunidades que hay confinadas por los combates que protagonizan las disidencias de las Farc, ELN, el EPL y grupos neoparamilitares.
En esa oportunidad se había dicho que el pelotón estaría conformado por 600 uniformados de una unidad especial antinarcóticos, 450 soldados que entrarán a engrosar las filas de la Tercera División del Ejército y otros 300 hombres de un batallón especializado. El número de pie de fuerza se suma a los más de 7.000 que ya había desplegados en el territorio. Por su parte, el gobernador del Cauca, Óscar Rodrigo Campo Hurtado, calificó como “acto demencial” y de “desespero” el homicidio de los cinco indígenas y resaltó el anuncio de la operación de la Fudra número 4. A su vez, recordó la recompensa que ofrece el Gobierno por información que permita ubicar a los cabecillas de estos grupos criminales. “Recuerdo que hay recompensa por alias ‘Mayimbú’, de mil millones de pesos, como bien lo informó el Presidente en una anterior visita, y también hay recompensas contra alias ‘Barbas’ y alias ‘El Indio”, concluyó el Gobernador.