En medio de las reacciones adversas por el rearme de Iván Márquez y otros jefes de las Farc, el 30 de agosto el presidente Iván Duque y el ejército anunciaron un operativo exitoso en San Vicente del Caguán. En la madrugada de ese viernes fue bombardeado un campamento de una disidencia de las Farc en el que murió su jefe Rogelio Bolívar Córdoba, alias Gildardo Cucho, quien cayó junto a 14 de sus hombres. La acción militar se convirtió este martes en el blanco de los cuestionamientos durante el debate de moción de censura contra el ministro de Defensa, Guillermo Botero, ya que entre los cuerpos que fueron identificados en el Caquetá había siete menores de edad. La revelación la hizo el senador citante del debate Roy Barreras, quien expresó que el ocultamiento de esta información al país es suficiente para que Botero dimita de su cargo. En el Capitolio, Barreras reveló el dictamen de Medicina Legal que confirma las edades de quienes fueron presentados como “delincuentes muertos en desarrollo de operaciones militares”.
En contexto: Liberales y Cambio Radical votarían en bloque en contra del Ministro de Defensa“Ministro, usted le escondió a Colombia que ese día de septiembre bombardeó siete niños y quizás son cuatro más, porque las pruebas de Medicina Legal muestran que otros cuatro cuerpos llegaron tan despedazados, que solo pudieron identificar que tenían menos de 20 años. Llegaron restos de cadáveres que se calculan están entre los 15 y 20 años”, dijo Barreras. El reporte de Medicina Legal está fechado el 19 de septiembre y en este se detallan las edades, identidades y estado de los cuerpos. Entre los muertos hay una niña de 12 años. La denuncia se esparció rápidamente por redes sociales, de manera que al filo de concluir el debate el expresidente Álvaro Uribe tomó la palabra para pedir que el ministro Botero pudiera explicar el tema. "El día de la votación no se escucha ni al citante ni al ministro, insistió Uribe. No creo que el Senado deba llegar a la votación sin tener esa información; insisto porque son temas muy delicados". Al tomar el micrófono, Botero confirmó la muerte de los siete menores, pero señaló que el ejército desconocía de su presencia en el campamento. "Cuando esta operación se hizo no se sabía de la presencia de menores. Se revisó clarísimamente la legislación, los abogados conceptuaron posiblemente que el señor Gildardo Cucho era una amenaza para la seguridad nacional y que como tal se podía bombardear el sitio".Puede leer: Crimen de Dimar Torres: el teniente que lo sabía todoEl ministro aseguró que este tipo de operaciones tienen control judicial y señaló que el bombardeo estuvo soportado en una investigación de las Fiscalías 114 y 135 especializadas de la dirección contra las organizaciones criminales. "Correspondería a las autoridades competentes a la luz de las normas del Derecho Internacional Humanitario la infracción de la que es responsable el Grupo Armado Organizado por utilizar menores como parte al parecer de su estructura de seguridad", señaló. El ministro hizo un recuento de armamento hallado en el lugar: 12 armas largas tipo fusil, 1 arma de acompañamiento tipo ametralladora y dos pistolas. "Quien infringe el DIH es quien coloca a una persona protegida en un riesgo que no debe soportar", subrayó.De inmediato, el senador Barreras tomó el micrófono y aseguró que la declaración del ministro confirma "las peores hipótesis". El senador dejó en el aire varios interrogantes, entre ellos si consultó abogados antes o por qué los consultó: "No ha contestado por qué le ocultó a Colombia que murieron siete niños en ese bombardeo, o no lo sabía y se enteró hoy por mi informe... O sí lo sabía, y por eso consultó abogados, y no ha dicho por qué lo ocultó. Aunque sea cierta la aberración de suponer que una niña de 12 años portando fusil era una criminal, usted no lo podía ocultar, eso es un adefesio". Para el senador Barreras, un bombardeo de esta naturaleza viola el principio de proporcionalidad ya que está prohibido organizar ataques cuando se pueda prever que se causarán incidentalmente daños a bienes civiles o muertos o heridos entre la población civil. "Usted dirá que esa niña no es una civil, así como los otros seis niños", concluyó.