El ministro de la Defensa, Iván Velásquez, reconoció que el nuevo cese al fuego decretado con un grupo importante de disidencias de las Farc del llamado Estado Mayor Central, se firmó con sujetos que se niegan a renunciar al delito de la extorsión.
“El tema relacionado con la extorsión. Es un asunto que se continúa discutiendo en la mesa, pero para el gobierno es un tema de especial de preocupación, la manera como organizaciones incluidas estas que están ahora en el cese decretado el día de ayer, como estas organizaciones continúan extorsionando todos los sectores de las poblaciones en territorios en los que tienen presencia”, dijo el ministro Velásquez.
De acuerdo con estadísticas de la Policía, la extorsión en la actualidad presenta un incremento del 20 %, delito cometido en un alto porcentaje por las disidencias de las Farc del Estado Mayor Central de Iván Mordisco y alias Calarcá, este último con quien el gobierno quiso mantener el cese al fuego, pese a que el mismo Calarcá dijo que veía difícil llegar a un acuerdo de paz con el gobierno Petro.
Alias Calarcá
En entrevista reciente con SEMANA, alias Calarcá, jefe de al menos 1.700 integrantes de las disidencias de las Farc del Estado Mayor Central, dijo que venía con pocas probabilidades que entregarán las armas y que llegarán a un acuerdo con el Gobierno Petro en los dos años que le quedan de administración.
“Somos una guerrilla que nos llamamos el ejército del pueblo y nuestros planteamientos son muy grandes, verdaderamente de cambio. Y no se van a discutir en dos o tres días. Tal vez el presidente Petro tenga en su imaginación que se puede hacer, pero no lo acompaña el gobierno que tiene”, dijo Calarcá.
Agregó que: “hemos enfrentado la guerra durante estos años, no nos asusta, estamos apostándole porque hay un momento, pero si llega un gobierno que levante la mesa, no nos preocupa. Estamos demostrando que queremos la paz. Si nos cierran las puertas, nos vamos, seguimos haciendo lo que hemos hecho toda la vida”.
Sobre la entrega de armas manifestó que: “no me veo entregándolas. Si hubiera querido, lo habría hecho en 2016, cuando estaba todo el secretariado”.
“Este es un conflicto muy largo y sé que tengo un poquito más de la mitad de mi ciclo de vida. Tan fácil no va a ser. Para acabar con el hambre, la miseria, la desigualdad, el desempleo, eso tiene pelos. Que se apaguen las armas y se dejen a un ladito, que no se disparen, es otra cosa, pero que nosotros corramos a entregar las armas, no. Por lo menos en la agenda de nosotros no está eso”, añadió.
Por su parte el ministro de Defensa, Iván Velásquez, señaló que el nuevo cese al fuego irá hasta el próximo 15 de octubre, acción que no está dirigida al otro grupo de más de 2.600 hombres que decidieron apartarse de la mesa de negociaciones de paz liderados por Iván Mordisco.
Dijo el ministro que la orden a la fuerza pública es atacar con todas sus capacidades a los hombres de Mordisco.