Colombia se estremeció por la historia de una bebé que murió en medio de un bloqueo en el sector de La Delfina, en el distrito de Buenaventura. Lamentablemente, su caso se suma a otros ataques a la misión médica en el Valle del Cauca en lo que va corrido del paro nacional, que no comete la mayoría de los manifestantes pacíficos, pero que sí producen tragedias por las acciones de unos pocos.
Según la versión entregada oficialmente por la secretaria de Salud, María Cristina Lesmes, en medio de los enfrentamientos, la ambulancia que transportaba a la recién nacida intubada tenía que pasar y los civiles le propusieron hacer un trasbordo, pero eso no fue posible por el aparato al que estaba conectada.
“Como no pueden pasar, se pierde tiempo precioso con la vida de un bebé que estaba falleciendo ahí y la ambulancia queda entre unos manifestantes y la fuerza pública”, dijo Lesmes en entrevista con SEMANA. Agregó que sin importar el contexto o el conflicto que ocurra en cualquier lugar del mundo la misión médica es reconocida por el Derecho Internacional Humanitario y ningún vehículo con los emblemas de la misión médica puede ser detenido por nadie.
La funcionaria dijo que es fundamental que haya un corredor que garantice que las ambulancias y la misión médica en general no sean detenidas, requisadas, ni mucho menos atacadas, sin importar el lugar. El caso de la pequeña fallecida este fin de semana se suma al total de 163 casos registrados por la Gobernación en lo que va corrido del paro nacional.
En 49 de estos casos los objetos del ataque fueron ambulancias, de las cuales 28 están destruidas por acciones vandálicas. Además, se ha presentado robos de insumos, medicamentos y elementos de protección personal.
Sumado a eso, el personal médico también ha sido víctima de robos, insultos, golpes y otros, por parte de manifestantes de diferente índole, según la secretaria de Salud.
A partir de las denuncias específicas por cada caso, el Ministerio de Salud está ajustando las medidas jurídicas para tramitar ante los organismos y las autoridades correspondientes “las infracciones a la misión médica por población civil, por fuerzas armadas y de policía”.
Por la gravedad de los bloqueos y la dificultad que han representado para la misión médica en el departamento, se tomó la decisión de que solo los pacientes en urgencia vital serán trasladados.
Este martes, precisamente por la coyuntura, 50 pacientes con cáncer que tienen procedimientos ambulatorios programados serán trasladados a Cali para recibir su tratamiento. Según la secretaria de Salud, si no se lleva a cabo, las personas en cuestión podrían perder la vida a falta de la atención requerida.
“Hemos logrado la organización de los pacientes de diálisis, nos han permitido el paso de ellos y hemos tenido que organizar de forma transitoria unidades de diálisis en municipios satélite, de forma de salvar vidas a pesar de no contar con todas las condiciones que se requieren para eso”, explicó Lesmes sobre las dificultades que ha tenido el sistema durante los últimos días.
Con ayuda de los organismos de derechos humanos, espera que la movilidad de estas personas sea posible, pues ya se han logrado más de 300 viajes con ayuda de la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría, los manifestantes y otros, a través de rutas humanitarias.
Si bien la estrategia ha servido, en momentos de urgencia no hay tiempo de planear y, aún así, sin ningún tipo de aviso previo, todos deberían respetar la misión médica, algo que para Lesmes es apenas básico.
De hecho, mientras Lesmes hablaba con SEMANA, una ambulancia en el municipio de Cartago fue vandalizada y en ese momento las personas pretendían usarla como escudo entre las partes de un enfrentamiento en la vía.
Finalmente, si bien la secretaria reconoce que las redes sociales son importantes y sirven para fines nobles, las noticias falsas, los videos editados y las mentiras en general han provocado muchos problemas.
Aunque en el pasado algunas ambulancias han sido descubiertas transitando droga y eso no está permitido bajo ningún estándar, en el contexto actual eso no ha sucedido y no hay ninguna razón para acusar a la misión médica de nada, más allá de que cumple su trabajo de salvar vidas.
“Recuerde que en esa ambulancia puede ir un familiar suyo”, concluyó.