Cada vez que llueve en Mocoa sus habitantes sienten miedo. Desde la avalancha del 31 de marzo de 2017 en sus mentes la lluvia es sinónimo de tragedia. Este 11 de agosto el temor se convirtió en realidad. Los ríos Mulato, Sangoyaco, y Mocoa volvieron a crecer por las fuertes lluvias que duraron al menos cuatro horas en la madrugada.
Desde las 7 de la noche, el Sistema de Alertas Tempranas identificó un “fuerte sistema nuboso”, es decir, que la lluvia estaba próxima al casco urbano. Así fue, a las 11:15 pm empezó a arreciar y para las 3:45 de la mañana las alarmas se encendieron. Había que evacuar.Puede leer: Mocoa, una ciudad que debe vivir con las alarmas encendidasFue decretada la alerta roja. Más de 20.000 personas fueron evacuadas, debían ir a los puntos de encuentro que ya identificaban. Muchos de ellos lo perdieron todo, no hubo tiempo para recoger sus cosas, solo para salvar su vida. Los habitantes de Mocoa han recibido capacitaciones y simulacros para hacer frente a este tipo de situaciones después de la avalancha del año pasado. De hecho, el pasado 26 de julio se realizó un simulacro de evacuación en las horas de la noche.
La fuerza del agua averió un puente peatonal en el barrio 17 de Julio que había sido construido un año atrás por la avalancha. Según las autoridades no hay víctimas, solo daños materiales. Sin embargo, al hospital José María Hernández han ingresado tres personas con crisis nerviosas, según el periodista de Mocoa Germán Arenas.Uno de los problemas más graves en Mocoa es que cuando la lluvia arrecia daña los canales de comunicación. El puente militar que comunica con Pitalito -instado después de la avalancha- sufrió graves daños y por tanto la salida está restringida. La vía hacia Villagarzón también resultó afectada, pero fue reparada rápidamente por los operarios de la obra.Tras la emergencia, el presidente Iván Duque le dio instrucciones al director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Eduardo José González, para que se trasladara a Mocoa y coordinara la respuesta.Le sugerimos: Mocoa, la tragedia continúaEn este momento está reunida la sala de crisis departamental para evaluar los "daños en viviendas, y obras de mitigación que soportaron la fuerza de las aguas y salvaguardaron la vida", informó la Ungrd.
Hasta el momento, se contabilizan más de 100 viviendas afectadas. Según cuenta el periodista Arenas, se han registrado 18 casas afectadas en el barrio San Agustín, 5 en el barrio Modelo, 7 en el barrio Miraflores, 3 en Los Álamos, 2 en el Naranjito, 6 en La Reserva, 29 en El Progreso, 21 en La independencia, 3 en La Loma, 4 en La Peña, 4 en las Las Acacias, 10 casas en José Homero Bajo, en las veredas las Planadas 3 casas y Rumbayaco 3."En estos momentos el nivel del río Sangoyaco ha disminuido y se encuentra en nivel seguro. Por su parte, el río Mulato se mantiene en nivel amarillo a pesar de presentar disminución en su cauce", informó la Ungrd. El Ejército hizo un sobre vuelo de la zona para ver las afectaciones.
Aunque ya se ha dado un parte de “normalidad”, las autoridades se mantienen alerta. “Desde las 5 de la mañana hay aparente calma. Pero ya se empieza a ver nubosidad. De acuerdo a la información que nos llega vía satélite es probable que siga la lluvia. Tenemos a un grupo de verificación haciendo inspección en la zona”, dijo a SEMANA Jorge Cuesvas, coordinador municipal del Sistema de Alertas Tempranas. Además, según el Ideam, se pronostican lluvias en el departamento.