Un nuevo golpe contra el Clan del Golfo se dio en el departamento del Chocó, en donde seis presuntos integrantes de esta estructura criminal murieron en dos operaciones militares. De acuerdo con el Ejército, “la primera operación, que se desarrolló en zona rural del municipio de Río Quito, permitió la muerte de cuatro presuntos integrantes de la subestructura “Héroes de Jesús Carretera”, entre ellos alias Jimmy o Chuky, quien sería cabecilla de zona y el jefe de finanzas de este reducto criminal”.
Así mismo, indicó la institución militar que “alias Jimmy o Chuky, quien tenía una orden de captura vigente por el delito de concierto para delinquir agravado, había sido capturado en el año 2010 y condenado a 10 años de prisión por este mismo delito y por homicidio. En el año 2020, cuando recupera la libertad, retoma su actividad delictiva ingresando como cabecilla armado de la subestructura “Héroes de Jesús Carretera”, quedando bajo el mando y como hombre de confianza de alias Molina, cabecilla principal de la misma”.
Sobre el área de injerencia de alias Chuky, señaló el Ejército que “este individuo tenía su zona de operación en los municipios de Quibdó, Paimadó, Lloró, Bagadó, Juradó, Nóvita, Cértegui, Condoto, Yuto y Tadó, poblaciones donde se dedicaba a realizar extorsiones, amenazas, homicidios y planeaba acciones terroristas en contra de la Fuerza Pública y la población civil de la región”.
Sobre la segunda operación, indicó el general Juvenal Díaz, comandante de la Séptima División del Ejército que, “en el área general de la vereda Teguerre Alto, del municipio de Riosucio, fue muerto en desarrollo de operaciones militares alias Soldadito, presunto integrante de la subestructura Pablo José Montalvo Cuitiva, del Clan del Golfo, y quien sería un coordinador logístico del grupo criminal, en esta región del departamento. Otro presunto miembro de esta subestructura se presentó ante los soldados manifestando su intención de someterse a la justicia”.
En medio de la acción militar se incautaron cuatro fusiles, tres armas cortas, más de 1.000 cartuchos de diferente calibre, 17 proveedores, al igual que abundante material de intendencia y comunicaciones.
Otro resultado
Es de señalar que, en otra acción de la Séptima División, en zona rural del municipio de Guadalupe, al norte de Antioquia, fue descubierta una bodega de explosivos de las disidencias de las Farc del Frente 36.
“En el lugar donde funcionaba la fábrica fueron hallados 10 cilindros de 40 libras armados con detonadores y listos para ser empleados, 10 cilindros recortados rellenos de material de explosivos, 25 paquetes de explosivos, un bulto de sustancia explosiva, 33 galones de cinco litros, al parecer con explosivos cebados y listos para ser empleados. También se incautó un fusil, una escopeta, tres pistolas, más de 330 cartuchos de diferentes calibres, proveedores, material de intendencia y equipos de comunicación”, explicó el Ejército.
Así mismo, se informó que, “en la misma acción, fue muerto en desarrollo de la operación militar alias Diomedes o Carlos, presunto cuarto cabecilla del grupo armado organizado residual E-36″.
Además, otro sujeto, que respondía al alias de Andrés, quedó herido y fue trasladado a un hospital en el municipio de Yarumal, en donde fue operado de urgencia, custodiado por las autoridades para posteriormente hacer legalizar su captura.
Además, dos menores de edad fueron recuperadas y entregadas al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Según las investigaciones, alias Diomedes o Carlos tenía un prontuario delictivo de cinco años en el GAO-r Estructura 36, donde fungió como guerrillero, explosivista y cabecilla de la Compañía Yesid Guevara. El sujeto sería el responsable de instalar artefactos explosivos para atacar a la fuerza pública, de coordinar homicidios selectivos y perpetrar acciones terroristas en los municipios del norte de Antioquia.