Sobre el mediodía de este jueves 20 de octubre se hizo viral una publicación en las redes sociales en la que se advertía que una persona se encontró a una mujer deambulando en el norte de Bogotá, por la carrera séptima, bastante desorientada.

Según se dijo entonces, al parecer podía estar bajo los efectos de alguna droga, como escopolamina, por lo que se empezó a pedir la colaboración de la ciudadanía para que ayudara a compartir la imagen y así poder dar con sus familiares.

SEMANA conoció el reporte que entregó la Policía Metropolitana minutos después de encontrar a la mujer. Todo ocurrió en el sector de El Codito, en la localidad de Usaquén.

“Hacia las 10:20 de la mañana fue encontrada una joven bien vestida, limpia y descalza sobre la carrera 7 en El Codito sentido sur-norte. La ciudadanía llamó a la Policía sobre las 10:20 a. m. y se atendió el caso en prontitud, llevando a la joven al Hospital Simón Bolívar, puesto que al parecer estaba escopolaminada”, fue el reporte que dio el uniformado que atendió el caso.

Efectivamente, la mujer fue llevada al Hospital Simón Bolívar, en donde recibió atención médica y en donde se descartó que estuviera bajo los efectos de algún tipo de droga. Hasta el lugar llegaron sus familiares.

Hace pocos minutos, la Subred Norte, a la que pertenece el centro médico, dio a conocer un pronunciamiento oficial sobre lo ocurrido con esta paciente.

“La Subred Integrada de Servicios de Salud Norte E. S. E., ante la publicación en redes sociales frente a la atención médica de una paciente que ingresó al Hospital Simón Bolívar, al ser encontrada en vía pública deambulando y sin familiares, se permite informar que desde el principio se garantizó su proceso de atención de salud, encontrándose clínicamente estable, con atención integral”, dijo la entidad en un principio.

Posteriormente agregó: “Sobre las 3:00 p. m. hizo presencia en la institución la madre de la paciente y aclaró datos clínicos relevantes para continuar con la atención de la paciente, esta vez de forma más profunda”.

Explicado en otras palabras, la mujer que fue encontrada deambulando presenta algunos trastornos psiquiátricos.

La Subred Norte especificó, además, que por el momento la joven se encuentra en observación, a la espera de resultados de exámenes practicados y tratamiento clínico instaurado, con estabilidad clínica y sin riesgo vital.

Secta satánica Los Carneros estaría involucrada en la desaparición del niño Maximiliano Tabares en Antioquia

SEMANA conoció detalles del proceso de investigación que adelantan las autoridades para dar con el paradero de Maximiliano Tabares Caro, un niño de seis años que extrañamente desapareció en el municipio de Remedios, Antioquia. La Fiscalía señala a una secta satánica familiar de protagonizar el delito, denominados como Los Carneros.

Secta satánica estaría detrás de la desaparición de Maximiliano Tabares, de seis años, en Remedios, Antioquia. | Foto: Cortesía: API.

El temido grupo practicaría ritos satánicos con el objetivo de encontrar señales que los llevara al punto exacto donde estarían supuestas guacas de oro en las montañas de la región. En los relatos recopilados por los investigadores, los habitantes dieron cuenta que sus integrantes cavaban en la tierra repetitivamente para hallar los elementos valiosos.

La secta estaría integrada por los allegados del menor de edad y los amigos que pudieron convencer en el camino. El padrastro de la víctima, Fabio Andrés Carmona Ramírez, sería el encargado de organizar la agrupación. De acuerdo con los datos que tomó la Policía Nacional en la zona, él se haría llamar dentro de Los Carneros con el alias de El Líder.

También la madre estaría involucrada, Sandra Patricia Caro Pérez, quien aparece con el alias de La Cacica. La lista la completa la abuela de Tabares Caro, Dámaris Estela Pérez Escalante; Róbinson Arboleda Ramírez, alias Orejas, identificado como discípulo; esa misma condición la compartirían Fabián Monsalve y Susana Ceballos Zapata.

Aunque la mamá del niño aseguró que se le perdió de vista cuando lo envió a una tienda del corregimiento de La Cruzada, las autoridades tienen una hipótesis escalofriante. Presuntamente, estas personas habrían utilizado el cuerpo de Maximiliano Tabares Caro para librarse de un peso que tendría la secta satánica de Los Carneros.

Esa posición la habría asumido el padrastro. Los miembros del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía tienen la certeza de que, supuestamente, este hombre habría convencido al resto de la familia de soltar el cadáver a razón de que estaba poseído por un espíritu. Ellos habrían aceptado esa información y gestionado la desaparición.

Frente al material que se recopiló en el terreno durante los últimos 30 días, cuya información aportada sería beneficiada con 60 millones de pesos, el ente de acusación considera imputar los delitos de concierto para delinquir, desaparición forzada agravada, tortura agravada, encubrimiento por tortura y lesiones personales.

El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, reveló en la tarde de este jueves que la investigación cambió de rumbo inesperadamente la semana pasada. Hasta su despacho llegó la extraña hipótesis de la Fiscalía y Policía: los propios familiares habrían protagonizado la desaparición de la víctima de seis años, impulsados por deseos satánicos.

“Había una sospecha en los vecinos de esta familia. Una cosa que horroriza y que nos debe llamar a la reflexión. Un caso que merece el rechazo más contundente. Nosotros hemos venido acompañando toda la acción de los investigadores. Esta investigación la teníamos, pero queríamos ser prudentes”, afirmó el mandatario departamental.