El recuerdo del estremecedor crimen de Yuliana Samboní regresa por cuenta de un terrible asesinato ocurrido en Fundación (Magdalena). La vida de Génesis Rúa, de 9 años de edad, terminó abruptamente luego de que desapareciera el viernes a las 2 p.m. y sus restos fueran hallados luego en el patio de la vivienda de Adolfo Enrique Arrieta García, de 47 años de edad, cuando él los estaba incinerando en un fogón de leña.Mientras los familiares de la pequeña denunciaban que no encontraban a la menor y la comunidad ya estaba en su búsqueda, hacia las 4 p.m. un llamativo olor y una densa columna de humo llamó la atención a los vecinos del barrio del humilde San José, quienes avisaron a la Policía. Al llegar, los uniformados pidieron permiso para ingresar y los atendió el Negro, como también se le conoce a Arrieta, quien les explicó que estaba quemando el cuerpo de un perro que había matado por haberlo mordido. Le puede interesar: Las escabrosas revelaciones del crimen de Yuliana Los uniformados pidieron revisar la propiedad y hallaron la terrible escena, por lo que procedieron a detener en el acto a Arrieta García, quien reside allí solo. La gente, entretanto, se enteró de que lo que tenía el señalado en su patio era un cuerpo humano. Sin conocer aún cuál era su identidad, asumieron que era el de Génesis, por lo que los ánimos se caldearon y terminaron en asonada.El sujeto debió ser sacado con fuertes medidas de seguridad para impedir un linchamiento y fue trasladado a Santa Marta. Los vecinos destrozaron su casa, sacaron sus cosas a la calle y les encendieron fuego junto con el camión con el que Arrieta García se ganaba la vida transportando leche.IraSegún la versión de la defensa, la pequeña Génesis habría estado jugando a las afueras de la vivienda del agresor con otros menores, un barullo que el agresor -que supuestamente dormía- no habría soportado. Preso de la ira, la hace entrar a la vivienda para luego arremeter contra la menor, a la que estranguló y luego intentó carbonizar. Los familiares, por su parte, han manifestado que Génesis se dirigía a casa de una tía, a una cuadra de distancia, para almorzar.Génesis, que cursaba tercero de primaria, era la menor de una familia de cinco miembros, hija del tendero Benjamín Rea y la ama de casa Yeimy Vizcaíno. Precisamente, fue su madre quien reconoció en la escena del crimen un pequeño arete de oro, así como vio restos de vómito que coincidían con lo que había comido la menor horas atrás. En ese mismo sitio habría sido asfixiada.Arrieta García reconoció lo hechos y narró lo que recordó, aunque -supuestamente- no sabe por qué lo hizo. Su captura fue legalizada y, mientras es procesado por el delito de feminicidio agravado, fue enviado a la cárcel samaria Rodrigo de Bastidas.AntecedentesEl director seccional de la Fiscalía, Vicente Guzmán, manifestó este lunes que el señalado tiene antecedentes de una condena por lesiones personales y una anotación sin registro criminal porque la víctima, su expareja, no denunció. Se halló que, en ese episodio, el Negro habría accionado tres veces contra ella con intención de asesinarla y, por ello, ella decide separarse.Para las autoridades de Magdalena, se trataría del quinto caso de feminicidio en el departamento. Le recomendamos: Sobrevivir a un ataque con cuchillo: el valiente e inspirador testimonio de Paola Noreña Los restos de la menor están siendo sometidos a exámenes por parte de Medicina Legal para establecer mediante el ADN la identidad de la víctima y si, además, hubo algún tipo de abuso sexual. Así mismo, la Fiscalía solicitó un examen para constatar el estado mental de Arrieta García.RepudioLa directora del Bienestar Familiar, Juliana Pungiluppi, expresó su indignación por el hecho e informó que un equipo interdisciplinario se desplazó este lunes hasta Fundación para atender a la familia de la víctima, en especial apoyo y acompañamiento psicosocial que será brindado a sus hermanos de 12 y 16 años de edad.
“Confiamos en que al culpable del asesinato la justicia le imponga la máxima pena y hago un llamado a toda la sociedad para ser corresponsables de la protección de la niñez y a denunciar a la Línea 141 cualquier situación que ponga en riesgo la integridad y la vida de los menores”, agregó la funcionaria.El lunes también se pronunció el presidente Iván Duque, quien deploró el crimen: “Con indignación, como colombiano y padre de familia, condeno el cruel asesinato de menor en Fundación, Magdalena. Toda nuestra solidaridad con sus familiares. Solicito a las autoridades agilizar las investigaciones que permitan hacer justicia. Debemos proteger a nuestros niños”, trinó el mandatario en horas de la mañana.
Esta no es la primera tragedia dolorosa a la que hace frente Fundación. En mayo de 2014, 32 niños murieron calcinados al quedar atrapados en el bus que los transportaba desde la Iglesia Pentecostal Unida de Colombia hacia sus casas. Puede ser de su interés: El sacrificio de los inocentes En una absurda decisión, el conductor del automotor decidió proveer combustible directamente al motor que minutos antes se había apagado, ocasionando la terrible situación. Hoy este municipio vuelve a estar de luto por sus niños y espera la acción de la justicia.