Diego Valencia Camayo, un niño de 9 años, se convirtió en la nueva víctima que deja la violencia contra los menores de edad en Colombia. El cuerpo del pequeño fue encontrado el pasado 19 de diciembre en el corregimiento de Caimalito, ubicado en la ciudad de Pereira.
El hecho por ahora es todo un misterio, pese a que las autoridades ya han realizado las primeras pesquisas del caso. La pesadilla para la familia del niño inicio el 16 de diciembre, ese día salió de la casa y no volvió más, hasta que tres días después fue encontrado sin vida.
De acuerdo con lo que han manifestado los allegados a la víctima, él se fue de su vivienda para preguntar a qué hora iniciaba la novena, pues era uno de sus planes favoritos y tenía pensado asistir junto a su mamá. Sin embargo, desde ese momento comenzaron los sucesos extraños.
Pasó más de una hora y Diego no llegó a su casa, lo que generó preocupación. Ante esto, su mamá lo llamó al celular, él contestó de manera normal y le dijo que iba a ir a la cancha de fútbol a jugar un rato, pero la llamada se cortó de manera repentina después de que la mujer le preguntara por qué no había pedido permiso.
Intentaron llamarlo en varias oportunidades y nunca recibieron respuesta, lo que aumentó la preocupación de sus papás. Además, cuando verificaron el WhatsApp del pequeño, se dieron cuenta de que su foto de perfil había sido eliminada, lo que incrementó la angustia.
La intranquilidad se apoderó de la familia del menor de 9 años; de inmediato, iniciaron una búsqueda con ayuda de sus vecinos para intentar localizarlo y verificar qué había pasado. Pasaron los días y no había rastro alguno.
Finalmente, después de tres días de búsqueda, el cuerpo del pequeño fue encontrado en una zona boscosa del mencionado corregimiento, sitio conocido como El Maizal.
El Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía (CTI) hizo presencia en el lugar y realizó el respectivo levantamiento del cuerpo. Hasta el momento, se desconocen las causas que generaron la muerte de Diego Valencia.
La noticia ha generado conmoción en este sitio del país. Las autoridades ya se encuentran realizando las respectivas investigaciones para esclarecer cómo fueron sus últimas horas de vida y establecer qué fue lo que pasó. Al tiempo, la familia de la víctima exige justicia para que su caso no quede en la impunidad.
El colegio en el que estudiaba el niño se pronunció a través de un comunicado y se mostró triste por la noticia del hallazgo del cadáver. “La Institución Educativa Gabriel Trujillo lamenta profundamente la pérdida irreparable de nuestro estudiante”, señaló.
De la misma manera, aprovechó para enviar un mensaje a los papás del menor y demás allegados que hoy en día enfrentan el duelo de la dura pérdida. “Acompañamos a su familia en estos difíciles momentos, enviamos nuestro abrazo de fortaleza y resiliencia para todos sus seres queridos”, indicó.
Las autoridades le han hecho un llamado a la comunidad para que facilite cualquier información que permita saber qué fue lo que pasó con Diego Valencia, la nueva víctima de la violencia que se vive contra los niños en Colombia.