En medio de los diálogos de paz que avanzan entre la guerrilla del ELN y el gobierno de Gustavo Petro, el frente de Guerra Occidental Omar Gómez, anunció un paro armado indefinido en varias zonas del departamento del Chocó, a partir de las primeras horas de este domingo 11 de agosto.
El mensaje fue tomado como una amenaza por las Fuerzas Militares, que de inmediato desplegó un enorme dispositivo de 5 mil hombres y mujeres que se encargarán de intensificar los operativos para neutralizar cualquier intención terrorista de los grupos ilegales que delinquen en el litoral pacífico.
Pero ante la amenaza del Ejército de Liberación Nacional, se vienen adelantando consejos de Seguridad con la Gobernación del Chocó, alcaldías de los municipios de Istmina, Medio Baudó, San Juan, Sipí, Nóvita, líderes sociales, defensores de Derechos Humanos e instituciones nacionales para generar estrategias que no permitan sembrar el terror a causa de los grupos armados.
Pero en medio de toda esa campaña que se adelanta contra organizaciones como el ELN, el Clan del Golfo y las disidencias de las Farc, el comandante de las Fuerzas Militares envío un contundente mensaje al anuncio de paro armado que iniciaría en las próximas horas en el departamento de Chocó.
“Es una muestra obviamente de no aceptar esa mano generosa que el gobierno ha ofrecido en entorno a la paz. Estaremos con Ejército, Armada y Fuerza Aérea para dar seguridad a esas comunidades y contrarrestar cualquier actitud delictiva que ese grupo armado quiera hacer en el sector donde anunció el paro armado”, advirtió el almirante Cubides.
Por eso, los 5 mil uniformados que llegarán a reforzar la seguridad en Chocó, desplegarán puestos de control en todo el departamento e intensificarán las operaciones militares para mantener la seguridad de la región.
El Ejército Nacional informó en un comunicado que el paro armado con el ELN “se convierten en un grave constreñimiento en contra de las poblaciones más vulnerables”.
Así mismo, denunciaron que solo este año la guerrilla del ELN ha instalado artefactos explosivos, que impiden la movilidad y la economía de los habitantes del departamento del Chocó, pero con el despliegue de las tropas se ha logrado desactivar por lo menos 80 minas antipersonal y se han logrado capturar a 45 milicianos, que particularmente en su mayoría son de comunidades de indígenas.
Por su parte, el coronel Christian Leguizamón, comandante encargado de la Fuerza Tarea Conjunta Titán, aseguró que “rechazamos estos actos criminales con los que claramente se violan los derechos humanos, por ello invitamos a la población a que se comuniquen a las líneas 107 o 147 o se dirijan a la autoridad competente para denunciar terrorismo, narcotráfico, presencia armada, extorsión, secuestro o cualquier otro delito”.
El anunció del paro armado del ELN en Chocó provocó una ola de reacciones como la de uno de los negociadores en los diálogos de paz con esa guerrilla, asegurando que en los territorios nunca ha existido cese al fuego como se pactó con ese grupo armado ilegal y quienes han venido congelado las conversaciones en forma de protesta.
¿Qué exige el ELN?, preguntó Lafaurie. “Que el Gobierno, por decreto, lo saque de la lista de lo que es, un GAO, con lo cual, además, busca igualarse a la fuerza pública y legitimar su lucha armada. De hecho, podría restregarle en las narices el decreto a la Unión Europea, que, a pesar de la solicitud colombiana, no decide sacarlo de su lista de organizaciones terroristas”, afirmó.