Rituales satánicos y paro nacional del próximo 21 de noviembre parece una combinación poco probable, sin embargo algunos lo pueden creer. Le pasó al presidente de Fedegán, José Félix Lafourie, que publicó en su cuenta de Twitter las fotografías de un grupo de personas vestidas con mallas, túnicas, ligueros, botas, cadenas, arneses y pasamontañas, en lo que parece un performance BDSM, sin embargo Lafaurie aseguró que este era un ritual satánico frente a una iglesia del barrio El Poblado, de Medellín, para fortalecer el paro.
“Hay que orar por Colombia y rechazar aquellos que pretenden destruirla”, escribió Lafaurie en su cuenta de la red social, en la que agregó que “el rito” se realizaba trece días antes del paro, cosa que no era coincidencia porque “el número 13 simboliza rebelión/rebeldía”. Pero el análisis semiótico y la información que entregó Lafaurie, fue desmentida por cientos de tuiteros que explicaron que se trataba de una obra denominada ‘La peregrinación de la Bestia’, realizada por el Museo de Antioquia, con el apoyo de la Alcaldía de Medellín, con la dirección de Analú Laferal, politóloga de la Universidad de Antioquia y máster en estudios culturales y artes visuales en España.
Carlos Uribe, director de curaduría del Museo de Antioquia, le dijo a W Radio: “Lo más importante es que la comunidad esté tranquila, porque lo que se estaba realizando una acción artística, una acción performática, que tiene que ver con el proyecto Acciones Abiertas en el espacio público, un proyecto de la Alcaldía de Medellín y el Museo de Antioquia”. Lafaurie tuvo que aceptar que todo era falso, aunque no renunció totalmente a su análisis de las artes oscuras: “Acepto el error de confundir una ‘obra’ de teatro con un rito satánico. Pero a juzgar por las fotos de los protagonistas de la ‘obra’ teatral en sus atuendos y expresiones corporales, algo va de lo que me enseñaron los padres agustinos del Liceo de Cervantes o los jesuitas! (sic)”.
El presidente de Fedegán aclaró que fue engañado, aunque le preguntó a dos personas si la información era correcta, cosa que le corroboraron. Finalmente, pidió excusas. Esta es una muestra de que un grupo del uribismo está desesperado por desvirtuar el paro nacional del próximo 21 de noviembre.