La participación de exmilitares colombianos en el crimen del presidente de Haití Jovenel Moïse generó una controversia en el país, desde donde se ha pedido una investigación para determinar las causas y autores intelectuales del magnicidio.
Desde diferentes sectores se han conocido reacciones al hecho e incluso desde la oposición se anunció un debate de control político al gobierno del presidente Iván Duque, como lo señaló el senador del Polo Democrático Iván Cepeda.
Ante los cuestionamientos por la participación de exmilitares en el crimen, el presidente de la Asociación Colombiana de Oficiales en Retiro (Acore), John Marulanda, dijo que no se puede señalar como mercenarios a todos los uniformados que han abandonado las fuerzas.
“Por el Ejército pasan de 15 a 20 mil muchachos con servicio militar, militares voluntarios, oficiales. Una vez retirados, el seguimiento de la vida privada es imposible. 15 mil soldados al año que reciben el entrenamiento básico y salen a su vida civil. Lo que hacen con su vida personal los soldados y cuadros oficiales o suboficiales, se escapa al control. Unos toman el camino que no es, que nos tiene consternados”, señaló en declaraciones a la emisora Caracol Radio.
Agregó que “Acore es de oficiales y no de todos, somos solo 2.400. No tenemos ningún control ni ninguna autoridad del resto de militares del país. Nos han vuelto ropa de trabajo. Acore no tiene capacidad de controlar lo que hacen. No defendemos a los que cometen delitos, si no la constitucionalidad”.
“Ahora no pueden decir que todos los exmilitares somos mercenarios. El título genérico de oficiales en retiro nos salpica en medios, nos duele porque son colombianos y están metidos en un magnicidio. Acore es una asociación de oficiales, ellos no tienen nada que ver con nosotros”, insistió.
El excoronel del Ejército dijo que, al parecer, el crimen del presidente de Haití podría estar relacionado con narcotráfico, pues los militares llegaron a República Dominicana y allí cruzaron la frontera.
“Creo que es la primera vez que pasa de este nivel, conozco militares que han trabajado en crímenes comunes, delictivos, como narcotráfico. Hay indicios de que esto podría estar apuntado a narcotráfico. Yo he estado en Haití en asuntos de asesoría de seguridad y asesorando autoridades. Esto nos dignifica a militares retirados”, aseguró.
Señaló que incluso hay varios militares colombianos que se entrenan en diferentes países y puso de ejemplo lo sucedido en Emiratos Árabes, como en Irak.
“Los señores retirados de muchos cargos van a trabajar a Emiratos, quienes adquieren la nacionalidad de allá y no es ilegal o de mercenarios. El problema que se presentó es que en Emiratos hicieron una alianza con otros países árabes para enfrentar chiitas, por eso había colombianos ahí combatiendo”, explicó.
Y agregó que “eso desnaturalizó para ellos la función para cumplir, hubo dos abatidos. También hemos tenido oficiales que han trabajado en Irak. Eso forma parte de la vida y suboficial en retiro, ahí cada uno responde por sí mismo”.
Finalmente, explicó que los soldados retirados tienen pensiones muy bajas en tema de salarios.
“El consejo de veteranos, que reúne retirados, propone incremento en el salario y pensión de los soldados que pagan servicio militar y salen sin nada. Los soldados profesionales salen con sumas sumamente bajas. No es justificación, pero sí explicación de por qué algunos caballeros cometen este tipo de barbaridad”, puntualizó.
“Todos tenían las mismas botas”: juez que legalizó captura de colombianos
Entre tanto, un juez de Haití confirmó la identidad de los militares retirados de origen colombiano, quienes serían los responsables del asesinato del presidente haitiano, Jovenel Moïse, quien fue abaleado en la madrugada del miércoles en su casa, según un informe de Medicina Legal.
De acuerdo con el togado del caso, la “misión” que tenían los sospechosos “era arrestar al presidente Jovenel Moise y no matarlo”. Asimismo, detalló que cuando se le preguntó sobre el patrocinador de esta misión, James Solages, uno de los ciudadanos estadounidenses detenidos, dijo que “encontró este trabajo en Internet”.
Aunque son 15 los colombianos detenidos, por el momento se conoce la identidad de cuatro de ellos, presuntos responsables de este homicidio. Se sabe que son Alejandro Giraldo Zapata (01-04-1980);John Jairo Ramírez Gómez (17-05-1981); Víctor Albeiro Pinera Cardona (02-07-1981) y Manuel Antonio Groso Guarín, o Mauricio Groso Guarín (19-04-1980).
Mientras que los otros dos detenidos son de origen norteamericano: Joseph Vincent (28-09-1965) y James Solages (19-08-1985), este último es quien ha dado todos los detalles del plan que tenían en contra del mandatario haitiano.
El juez investigador, Fidélito Dieudonné, precisó que los cuatro colombianos llegaron a Haití el pasado 6 de junio y que entraron por República Dominicana. Además, precisó un detalle sobre la vestimenta de los implicados: “Todos tienen las mismas botas”.
Por su parte, el director general de la Policía de ese país, León Charles, en una rueda de prensa ofrecida junto al primer ministro interino, Claude Joseph, en la que se presentaron a los detenidos, sostuvo que ocho “mercenarios” colombianos están fugados y son buscados “activamente”, mientras que los otros tres murieron en tiroteos con las fuerzas de seguridad.
Al menos 28 atacantes participaron en el asesinato del presidente, dijo la Policía el jueves, precisando que 26 de ellos eran colombianos y dos estadounidenses de origen haitiano.
“Arrestamos a 15 colombianos y a los dos estadounidenses de origen haitiano. Tres colombianos murieron y otros ocho están sueltos”, dijo el director general de la Policía Nacional, Leon Charles, en una conferencia de prensa.
De otro lado, el juez dio más detalles sobre los elementos que fueron encontrados al momento de la detención de los implicados; al parecer los objetos fueron hallados por la Policía en un vehículo utilizado por los sospechosos. En él habían cinco armas de fuego, el servidor de la cámara de vigilancia del presidente Jovenel Moïse, la chequera del mandatario, ropa, comida y dinero, varios billetes de dólares de diferente denominación, un chaleco antibalas, celulares y demás.
Con información AFP.