Íngrid Betancourt cumplió su ultimátum y se fue de la Coalición de la Centro Esperanza. La precandidata correrá sola, en nombre de su partido, Verde Oxígeno, por la Presidencia de la República. Esto sucedió luego de que sus compañeros no aceptaron exigirle a Alejandro Gaviria que rechazara de manera pública el apoyo de Germán Barón Cotrino, senador de Cambio Radical.

En conversación con SEMANA la precandidata señaló que sus diferencias y decisiones sobre el partido no se tratan de una decisión personal. “Él está en un proyecto político con una estrategia política que es la suya y difiere de la mía”, explicó.

Además, Betancourt considera que Gaviria se equivocó al aceptar dichos apoyos. La precandidata también aseguró que la Coalición lamenta las decisiones. “La Coalición lo lamenta. Es una decisión política que tiene repercusiones y una de las repercusiones es que yo no puedo estar en un proyecto político con esas características, pero esto no tiene nada de personal”, dijo.

“Yo sé que Alejandro ha sido muy vehemente en contra mía y aun así no tengo absolutamente nada, ninguna animosidad, ni nada en contra de Alejandro, él está en una estrategia política que difiere de la mía”, aseveró.

En ese sentido, la precandidata señaló que no cree que Gaviria sea un buen presidente. “Yo creo que no. Porque yo creo que uno le ofrece al país el equipo de las personas con las cuales uno llega. Y si uno llega con personas de experiencias políticas que so contrarias al proyecto que uno dice querer adelantar, pues ahí hay una incoherencia. Todo en la vida son decisiones, el vector de nuestra vida es el fruto de nuestras decisiones. Entonces el vector de la vida de Alejandro, me parece a mí, se acomoda más a otro tipo de proyecto político, no el que él dice representar en este momento.”

Cabe señalar que Betancourt había demostrado su descontento con los acercamientos políticos que Gaviria tuvo con algunos políticos. La ruptura política entre los precandidatos comenzó el pasado martes durante el cara a cara de SEMANA y El Tiempo, cuando los dos se enfrentaron por apoyos a sus precandidaturas.

En plena transmisión, Íngrid denunció que Gaviria estaba llevando a la coalición apoyos indeseados. Ser refería al respaldo de Barón Cotrino.

“Tú has aceptado el apoyo de gente que me preocupa muchísimo. Nosotros partíamos de la base de que íbamos a tener confianza y que si eso sucedía, lo íbamos a decir en público. Yo convoco a la coalición para que hoy mismo debatamos este tema. No voy a dejar que los lobos entren a donde están las ovejas”, le dijo Íngrid.

“Lo suyo es hipocresía y oportunismo, no tiene otro nombre. La invito, como dijo alguna vez García Márquez, a mirarse en el espejo de sus propias faltas. ¿Por qué no examina la lista de la Alianza Verde? ¿No hay ninguna maquinaria ahí? Es disfrazar de superioridad moral”, le respondió Gaviria airado.

Desde entonces, Íngrid lanzó tres ultimátums a sus socios, dándoles tiempo para que retiraran a Barón de los apoyos de Gaviria. Inclusive, llegó a plantear que Gaviria debía ser expulsado si no accedía a sus exigencias.

Pero la cuerda se rompió este sábado al mediodía, al cumplirse el plazo del tercer ultimátum lanzado por Íngrid en menos de 72 horas. Sus compañeros de coalición no apoyaron su reiterada solicitud.

Como la alianza permitió que Barón mantuviera el respaldo a Gaviria, Íngrid partió.

Ella ya tenía todo listo para ir con su partido solo a primera vuelta, como SEMANA lo informó en varias oportunidades esta semana. Esta tarde, en su declaración de retiro, Íngrid deploró que sus compañeros no hubieran asumido una lucha frontal contra la corrupción.