Piedad Córdoba completa más de 30 horas hospitalizada en la Clínica El Rosario de Medellín y, aunque ha registrado mejoras en su estado de salud, continúa en la unidad de cuidados intensivos de dicho centro asistencial. Córdoba registró un bajonazo en sus defensas y un problema en la sangre que tuvo que ser atendido con urgencia.
Este martes, cuando el país se preguntaba qué pasaría con la congresista elegida este 20 de julio, cuando debe jurar y posesionarse como senadora del Pacto Histórico, la legisladora le dijo a SEMANA que, al menos hasta la mañana de este martes, no podría posesionarse. Las razones: estrictamente médicas.
En su cuenta de Twitter y ante la avalancha de especulaciones sobre su estado de salud, Córdoba escribió un mensaje en su cuenta personal de Twitter. “Buenos días. Me siento un poco mejor pero aún no hay dictamen de lo que padezco. Soy una persona habituada a la adversidad, yo me envalentono con el viento en contra. Pero si les hablo con franqueza, no son buenos tiempos. Muchas gracias por todos los mensajes de apoyo”, dijo.
Desde el 17 de julio, Córdoba ingresó al centro asistencial paisa y desde ese día ha permanecido en cuidados intensivos.
La directora científica de la Clínica El Rosario, Adriana Posada Restrepo, confirmó que a la senadora electa le aplicaron un medicamento para controlar su presión arterial que, hasta el domingo pasado, era alta y afectaba su salud.
Córdoba tuvo covid-19 hace tres semanas, como lo reportó la congresista cuando fue atendida en la Clínica Marly de Bogotá. Aunque fue asintomático, parece que le está pasando factura. Al menos, le generó un bajonazo en sus defensas que le alteró otros temas de salud.
“El covid baja las defensas y hace que el organismo sea susceptible a la sobreinfección de algunas bacterias. Ella presentó fiebre, malestar general e hipotensión. Ella está estable, mejorando”, detalló Restrepo a la prensa.
La antioqueña, que permanece acompañada de Natalia, su hija, y quien hace las veces de su jefe de prensa, está recibiendo terapia con antibióticos que le han generado una mejoría en su salud. Al menos, hasta la mañana de este martes no requería apoyo de oxígeno.
Desde la semana anterior, cuando la controvertida dirigente asistió al cónclave del Pacto Histórico en Medellín, se le notó cansada. Quienes presenciaron las sesiones en las que participó la senadora, le contaron a SEMANA que no era la congresista que el país conoce: la mujer que habla duro y sin titubeos. Al contrario, se le observó débil y con una voz que no parecía la suya.
En ese orden de ideas, la posesión de Piedad Córdoba este miércoles en el Senado está casi que descartada porque aún permanece en la UCI y no está en la capacidad de asistir a un Capitolio que tendrá la presencia masiva de congresistas.
Hasta la mañana de este martes, la senadora no había enviado la excusa médica que le permitirá no posesionarse. No obstante, lo hará en las próximas horas.
Si Córdoba mejora la entrante semana, podría acercarse al Congreso y tomar posesión ante el nuevo presidente de la corporación en una de las sesiones ordinarias. O si permanece en casa, podría posesionarse a través de un notario.
Córdoba quiere posesionarse y tiene claro que lo hará, pese a que el presidente electo, Gustavo Petro, le gustaría que se mantuviera al margen y no lo hiciera.
El mandatario de izquierda teme que cualquiera de sus investigaciones estalle y, además del escándalo que le pueda generar al Pacto Histórico, le quite una de las 20 curules que logró el progresismo el 13 de marzo pasado. Recordemos que la senadora arrastra procesos por farcpolítica; sus nexos con Álex Saab, el testaferro de Nicolás Maduro; sus polémicos ingresos a la cárcel La Picota, entre otros.