Lo que era una noche de ocio para compartir en pareja se convirtió en una verdadera pesadilla para una ciudadana colombiana y su novio de nacionalidad griega, de 31 años de edad, quienes terminaron siendo víctimas de un paseo millonario que inició en la Zona T en Bogotá y, gracias a las autoridades, terminó en Soacha, Cundinamarca, sin una tragedia que lamentar.
De acuerdo con el relato de la mujer de 25 años, todo inició en la Zona T de la capital del país, cuando ella y su novio, al salir de un supermercado de cadena, decidieron tomar un taxi en la calle.
“Yo estaba con mi novio y fuimos al Oxxo a comprar unas cervezas y algo de comer para llevarlos al Airbnb donde nos estamos quedando cerca al aeropuerto. Tratamos de tomar un Uber, pero no nos aceptaban, entonces decidimos tomar un taxi, mi novio sí lo dudó, pero yo fui la que no dudé, y en ese momento venía un taxi y lo cogimos”, dice la mujer.
Los detalles de lo que sucedió más adelante son desgarradores. “Llegamos a un semáforo, la vía estaba sola, no había ningún otro carro, y de un momento a otro se subieron dos hombres y se montaron cada uno de una puerta, primero nos agacharon la cabeza y nos empezaron a golpear”.
Los ladrones empezaron a pedirle a ella y a su novio todas las pertenencias que llevaban en el bolso, y como era de esperarse, también les quitaron las tarjetas bancarias y ahí llegó la zozobra por las amenazas de muerte.
“Me sacaron todo del bolso: el celular, las tarjetas, aunque en mis tarjetas gracias a Dios yo no tenía mucho dinero, pero nos empezaron a decir que si no les dábamos plata, nos iban a matar. Mi novio, en su otra cuenta, en la única tarjeta que él llevaba, le tocó enviarles 2.000 euros, pero ellos querían más; sin embargo, como los bancos internacionales tienen límites, les envió 3.000 euros, ellos retiraron ese dinero, pero querían más, por lo que después se les envió 800 euros más”, contó la mujer.
La angustia continuó por varios minutos más. “Nos empezaron a decir que nos iban a llevar hasta el aeropuerto. Todo el tiempo hubo una persona en una moto, quien era el que estaba retirando el dinero en las tarjetas, y ellos (quienes iban en el taxi) lo llamaban para preguntarle cómo iba lo que, al parecer, era otra situación con otra persona en otro taxi”.
Después de varios minutos rodando por Bogotá, el taxi llegó hasta Soacha y fue en un control del personal adscrito al Modelo de Servicio de Policía de la Metropolitana de Soacha que los uniformados se dieron cuenta de que algo extraño estaba pasando.
Los hechos se presentaron en la Autopista Sur, sobre la vía que conduce al peaje nuevo salto. Uniformados de la Estación de Policía Compartir observaron un vehículo de servicio público, el cual omitió la orden de pare por parte de los uniformados, por lo que, de inmediato, iniciaron el seguimiento al vehículo y lograron interceptarlo en el barrio el Altico de la comuna 6.
“Donde nos iban a dejar salió la Policía y ellos empezaron a acelerar muy muy rápido, estábamos asustados, pero la Policía venía detrás, hasta que llegó un momento en el que frenaron”, dijo la mujer.
Una vez detenido el vehículo, descendieron los tres presuntos delincuentes, quienes fueron capturados en flagrancia.
De acuerdo con las víctimas, todo el tiempo fueron amenazados con armas de fuego. Los capturados fueron dejados a disposición de la Fiscalía General de la Nación, donde un juez de control de garantías les dictó medida de aseguramiento en establecimiento carcelario y deberán responder por los delitos de secuestro y hurto calificado agravado.
“Seguimos actuando con contundencia en el marco de la ofensiva por la seguridad, judicializando a aquellas personas que pretendan afectar la tranquilidad de los habitantes de Soacha y Sibaté. Invitamos a la comunidad para que siga trabajando articuladamente con la Policía”, aseguró el coronel Edwin Correa, comandante de la Policía Metropolitana de Soacha.