Uno de los pocos países en los que no se han registrado casos de coronavirus, según su gobierno, es Corea del Norte. Su mandatario Kim Jong-un se refirió al “brillante éxito” de su nación que según él está relacionado con su poder de liderazgo. En declaraciones recogidas por la agencia estatal norcoreana KCNA, el mandatario manifestó que “el virus maligno” no entró porque enclaustraron el país. “Hemos evitado por completo el avance del virus maligno y hemos mantenido una situación estable contra la epidemia a pesar de la crisis de salud mundial, lo que es un éxito brillante”, dijo en una reunión con los principales políticos.
Pese al supuesto éxito, Kim señaló a sus dirigidos que no se pueden relajar porque en caso de que se dé una crisis tendría consecuencias muy graves para el país. “El alivio apresurado de las medidas contra la epidemia dará como resultado una crisis inimaginable e irrecuperable”, advirtió Kim, según el informe. En las imágenes publicadas se evidencia que el presidente y docenas de funcionarios parecían no estar practicando el distanciamiento social y ninguno usaba tapabocas, proceder que, se ha dicho, es la principal estrategia para evitar contagios. Sin embargo, de acuerdo con fuentes de CNN, en las calles todos los ciudadanos son obligados a usar mascarillas y practican algún tipo de distanciamiento social. Además, portavoces de Pyongyang han expresado que en la ciudad se está volviendo a la normalidad: los sitios de construcción, tiendas y hoteles ya están abiertos. También manifiestan que las escuelas reabrieron en junio, dijo una fuente.
El gobierno sostiene que no tiene ni un solo caso de covid-19 en su territorio, pero los expertos lo dudan, dada la devastación de un virus que ha infectado a casi 11 millones de personas en todo el mundo, de las cuales medio millón han muerto. Mientras tanto, su vecino Corea del Sur registra actualmente entre 40 y 60 nuevos casos por día, mientras que China se enfrentó a nuevos brotes el mes pasado. "Ha repetido varias veces que un levantamiento apresurado de las medidas antiepidémicas daría lugar a una crisis inimaginable e irreparable", señaló la agencia KCNA. Unas palabras que auguran que se mantendrá el aislamiento de Corea del Norte. El país ha asestado un duro golpe al comercio con China, el principal apoyo político y económico del régimen. Varias embajadas extranjeras en Pyongyang han cerrado temporalmente porque no pueden conseguir provisiones y hacer rotar al personal. Actualmente, cualquier persona que entre en Corea del Norte debe observar un muy estricto confinamiento de 30 días. Diplomáticos y expertos creen que la frontera seguirá cerrada durante todo el año. "No tiene otra elección más que mantener su frontera cerrada con China, es inevitable", declaró Hong Min, del Instituto coreano para la Unificación Nacional. "El cierre de la frontera con China es quizá malo para su economía, pero los dirigentes de Pyongyang parecen haber decidido que impedir una epidemia es más importante para mantener el control del país", añade.
Un experto de la ONU advirtió el mes pasado del aumento de la inseguridad alimentaria como consecuencia del cierre de las fronteras. Antes de la crisis del coronavirus ya se consideraba que más del 40 % de la población sufría inseguridad alimentaria, con muchos casos de desnutrición. *Con información de la AFP.