Esta semana se conoció en redes sociales la denuncia de Julieth Carranza, una estudiante colombiana varada en Argentina, que compartió la polémica respuesta que recibió por parte de María Clara Rubiano Rivadeneira, cónsul primaria en Buenos Aires, ante su petición para un vuelo humanitario. Al exponerle la difícil situación financiera por la que atraviesa su familia por cuenta de la pandemia del coronavirus y su deseo de regresar a casa pagando su tiquete, Rubiano Rivadeneira le respondió de manera escueta a la joven Julieth.

“El hecho de escribir mucho no cambia tu situación. Tú sabes que hay pocos vuelos y no se puede mandar a todo el mundo, tratamos de hacer lo mejor posible. Esta es una experiencia difícil que espero les deje enseñanza a los jóvenes que creen que con estudiar alcanza”, escribió la funcionaria, mensaje que ha sido calificado de grosero por decenas de personas que han mostrado su indignación.

Más allá de la pertinencia o no de las palabras de la funcionaria pública, el hecho llevó a que la Cancillería se disculpara con Carranza una vez se hizo pública la situación. En diálogo con SEMANA, la estudiante de medicina contó que una trabajadora social la contactó y, posteriormente, el vicecanciller Francisco Echeverri, quien le dio la buena noticia de que sí la van a repatriar en un viaje que quedó establecido para el próximo 11 de julio. “Fue grosera, no entendió mi situación acá, no se puso en mis zapatos ni en los de mis padres. Fue grosera y me hace entender que vine a estudiar a Argentina por capricho, y lo hice por necesidad porque en Colombia no podía pagar un semestre de medicina”, comentó. Los estudios de la cónsul Pero este no es el primer cuestionamiento contra María Clara Rubiano Rivadeneira. En el portal Función Pública se encuentra publicada su hoja de vida, que da cuenta de que su formación académica se limita a básica secundaria y un estudio en el exterior como “tasador martillero público y corredor”, que son las personas encargadas de dirigir subastas.

La hoja de vida está publicada en el portal de Función Pública. Esa profesión se dicta en varios centros educativos de Argentina. Culmina en tres años de pregrado y enseña a los estudiantes a “efectuar ventas en remates públicos y privados de cualquier clase de bienes inmuebles y muebles”, y a actuar como auxiliar de la justicia en la ejecución de sentencias de remate, de acuerdo con el pénsum de la Universidad de Morón.

El cargo específico de María Clara Rubiano Rivadeneira es primer secretario de relaciones exteriores grado 19, con un salario asignado de $5.738.031, como se lee en su perfil del Departamento Administrativo de la Función Pública, que agrupa en su página de internet los currículums de todos los funcionarios públicos del país. Demanda por su nombramiento SEMANA conoció también que en marzo de 2018 llegó al Tribunal Administrativo de Cundinamarca una demanda de nulidad electoral por el nombramiento provisional de Rubiano Rivadeneira en el cargo que ocupa actualmente como primera secretaria de relaciones exteriores en la ciudad de Buenos Aires. El caso lo llevó el magistrado Moisés Rodrigo Mazabel Pinzón, quien el 8 de marzo de aquel año recibió la demanda de diez folios interpuesta por un ciudadano identificado como Mario Andrés Sandoval Rojas, quien pidió la nulidad del Decreto 157 del 22 de enero de 2018 del Ministerio de Relaciones Exteriores, mediante el cual se emitió el nombramiento de carácter provisional de Rubiano Rivadeneira, pues su cargo es de carrera diplomática y consular, pero la funcionaria no es de carrera.

El Decreto 157 de enero de 2018 para el nombramiento de la funcionaria. En efecto, el Decreto 274 de 2000, conocido como el Estatuto de Servicio Exterior de la República y la Carrera Diplomática y Consular, establece categorías de esa carrera especial de manera jerarquizada y regula el ingreso, ascenso, permanencia y retiro de los funcionarios con base en el mérito. Según la ley, se requieren 25 años de tiempo de servicio para alcanzar la categoría de embajador o cónsul general, mientras que para el puesto de primer secretario se piden ocho años de experiencia. Sin embargo, de acuerdo con la hoja de vida de Rubiano Rivadeneira en función pública, antes de su nombramiento en 2018 durante el gobierno Santos tuvo dos trabajos: uno como consultora y asesora social (entre 2013 y 2017) y otro como socia propietaria (entre 1992 y 2017) en entidades o empresas que no se especifican.

Demanda tramitada ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca. Aunque la acción para anular su nombramiento recuerda que la funcionaria debió superar “el riguroso concurso de méritos, el curso de formación diplomática por cerca de un año, un año más en periodo de prueba, las calificaciones anuales de desempeño laboral tras ser inscrita en el escalafón y exámenes de ascenso cada 3 o 4 años”, la denuncia no prosperó por un “tecnicismo”. Vale recordar que un grupo de colombianos en Argentina denunciaron esta misma semana en redes sociales supuesta negligencia en el apoyo humanitario por parte del consulado colombiano. “Hay gente decidiendo entre pagar la renta y comer”, dice la denuncia de Claudia Silva, quien tomó la vocería de 350 connacionales en ese país que piden ayuda humanitaria en medio de la pandemia, casos similares al de Julieth Carranza.