Han pasado 19 meses desde la última vez en la que se abrió un proceso de regularización para migrantes venezolanos en Colombia. Mientras que durante la administración de Iván Duque estos procesos se habilitaban cada cuatro o seis meses, el gobierno de Gustavo Petro no ha ampliado las rutas de regularización que se establecían a través del Estatuto de Protección Temporal para Migrantes Venezolanos.
Sin embargo, el fenómeno de movilidad humana proveniente de Venezuela persiste pese a que las políticas públicas para hacer seguimiento a esa población se relenticen. Para cierre de 2023 en Colombia residían 2.864.796 venezolanos, según el más reciente informe de ese tema publicado por Migración Colombia.
Pero ese no es el único dato reciente. Una investigación periodística publicada por el diario La Nación de Venezuela encontró que cada día se están sellando 800 pasaportes de venezolanos que transitan hacia Colombia.
Esos son solo los datos de quienes deciden migrar de forma regular, a través de los puntos de control fronterizos, y la estadística no tiene en cuenta los cruces irregulares de aquellos que no tienen ese documento y, por tanto, migran de forma irregular.
Por ese antecedente, desde la sociedad civil le pidieron al Gobierno de Gustavo Petro reactivar los procesos de regularización. “Lamentablemente, nosotros sentimos que hay un retroceso en la política migratoria porque durante los últimos 5 años se abría un proceso de regularización para población migrante entre cada 4 y 6 meses. En este Gobierno llevamos 19 meses sin que se abra un nuevo proceso para que la población migrante se regularice”, advirtió la directora de la Fundación Juntos Se Puede, Ana Karina García.
El régimen de Nicolás Maduro no actualiza los datos migratorios y la información recavada por esa nota periodística tiene como sustento entrevistas realizadas a funcionarios migratorios de ese país, ante la falta de datos oficiales del Estado suministradas por el Palacio de Miraflores.
“Con la cifra que lanza La Nación nos preocupa porque están hablando de 800 pasaportes sellados al día. Estamos hablando de que al mes podríamos tener 14.000 personas que entran por los puntos de forma regular hacia Colombia. Esa es apenas la población que tiene pasaporte, que no que es la mayoría del país”, le dijo Ana Karina García a SEMANA.
La cuestión de reactivar los procesos para la regularización de venezolanos tiene implicaciones en varias vías. Cuando un migrante puede tener documentos de identificación en el país de destino, este logra insertarse en el empleo formal, la bancarización, adquirir bienes y servicios y pagar impuestos.
Por el contrario, los vacíos documentales están relacionados con el incremento de la xenofobia, explotación sexual en medio de la ruta migratoria y las violaciones a los Derechos Humanos para estos desplazados internacionales.
“Nosotros estamos convencidos de que este es un tema del restablecimiento de relaciones. Se ha tomado esto como un tema político y no como un tema humano. Para nosotros es evidente que más allá de cuál será la narrativa con Venezuela, lo que estamos haciendo es pedirle al Gobierno Petro que esto no se trata de narrativas políticas, sino que puede ayudar al desarrollo de Colombia. Un migrante regularizado es una persona que puede ayudar al crecimiento del país. Nuestro llamado al presidente es que nos abra estos procesos de regularización”, advirtió la directora de la Fundación Juntos Se Puede.
La población venezolana residente en Colombia se redujo 1 % entre 2022 y 2023. El censo de habitantes de esa nacionalidad pasó de 2.896.748 ciudadanos en 2022 a 2.864.796 en 2023, de acuerdo con el reporte entregado por Migración Colombia el pasado 30 de enero, durante el lanzamiento del Observatorio de Migraciones, Migrantes y Movilidad Humana que gestionará la Universidad Externado en alianza con esa entidad del Estado.
Unos 539.959 migrantes irregulares fueron identificados por esa entidad durante 2023, de los que 444.380 eran migrantes en tránsito que salieron del territorio colombiano por la selva de El Darien,de forma irregular y arriesgando sus vidas ante las mafias de los coyotes.
La fundación Juntos Se Puede llamó la atención sobre que “la situación actual de ausencia de un programa que permita la regularización migratoria para nada desalienta la voluntad de los venezolanos de buscar mejores oportunidades”. Ese fenómeno de movilidad humana podría acentuarse en pleno año electoral para unas elecciones presidenciales en las que Nicolás Maduro ya prometió que se hará reelegir.