Los focos en el departamento de Santander están puestos en un contrato celebrado por la Gobernación y la Unión Temporal Santander por el Mundo, debido a un presunto sobrecosto.
El contrato en cuestión fue firmado en julio y radicado en agosto de este año. El pacto tiene como objetivo que esta empresa preste “servicios de logística para los diferentes eventos que realice el departamento de Santander” por un valor de 3.000 millones de pesos.
SEMANA obtuvo acceso al documento en cuestión. Este expone que la Unión Temporal deberá brindar “todos los elementos técnicos de sonido, de video, de iluminación, de alimentación, movilidad, y recurso humano, entre otros, para los diferentes eventos que se programen en cualquiera de las jurisdicciones de los municipios”.
El presunto sobrecosto está, justamente, en el ítem de la alimentación: un almuerzo, que incluye una hamburguesa por un precio astronónico, es la manzana de la discordia.
El contrato plantea que para los almuerzos o cena de los eventos habrá dos opciones. La primera incluye una proteína (pollo, pescado, res o cerdo) de 250 gramos, cereal, ensalada y bebida, mientras que la segunda opción es una hamburguesa de carne de res “de primera de mínimo 300 gramos”, queso doble crema, tocineta, cebolla grille, tomate, lechuga y salsas, acompañada de papas a la francesa y gaseosa.
Cualquiera de las dos opciones que se elija para el almuerzo o cena del evento tendrá un costo de 86.250 pesos.
Pero los supuestos sobrecostos no se detienen en las hamburguesas. El documento incluye un almuerzo o cena “sencillo”, que consta de una proteína, cereal, ensalada y bebida, tendrá un valor de 63.250 pesos.
Adicionalmente, el alquiler de un salón “para una jornada de un día, no mayor a ocho horas”, con capacidad para hasta 1.000 personas, tiene un costo de 27.600.000.
Este jugoso contrato está en marcha y va por cuatro meses o hasta agotar el presupuesto “y en todo caso hasta el 30 de diciembre de 2022″, dice el propio documento. Los 3.000 millones del contrato se irían descontando hasta que termine el pacto.
SEMANA buscó de forma insistente al gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, pero no obtuvo ninguna respuesta. Sin embargo, desde la oficina de prensa de la Gobernación de Santander aseguraron que el contrato cumple con todos los requisitos legales y que las hamburguesas no han sido compradas. No obstante, aceptaron que el valor del plato difiere del precio en el que se consiguen en cualquier restaurante. Además, señalaron que se debe tener en cuenta que el costo incluye el valor del IVA y las estampillas.
Entre tanto, ciudadanos y veedores en redes sociales han señalado que es inaudito que se presenten este tipo de supuestas irregularidades: “Como es posible que una hamburguesa con papas y gaseosa tenga un valor de 87.000 aún con todos los impuestos es inaudito el valor, el desayuno y los sobre costos en los salones alquilados superan el 300 % del valor normal” y “¡Lo que le faltaba a la corrupción en Santander: $ 87.000 pesos por hamburguesa!”, fueron algunos de los comentarios al respecto.
Este no es el primer caso: en el 2019, el departamento fue el blanco de críticas porque se firmó un contrato en el que cobraban tamales a $ 30 mil, irregularidades que se suman a los líos registrados con el PAE en el pasado en esta zona del país, en donde gobernadores, secretarios y varios funcionarios públicos, fueron involucrados.