La Fuerza de Tarea Conjunta Omega es una de las unidades más importantes para el país debido a su jurisdicción, pues comprende los departamentos de Meta, Guaviare y Caquetá, zonas que en el pasado fueron fortines de la disuelta guerrilla de la Farc, hoy espacios copados por las disidencias en los que no tiene cómo operar contra estas estructuras criminales, pues así les fue ordenado.
SEMANA conoció un radiograma (instructivo confidencial) en el que la Fuerza de Tarea Conjunta Omega les dice a sus 6.231 hombres que se frenen las operaciones militares ofensivas contra los miembros del Estado Mayor Central de las Farc (disidencias) y las estructuras Jorge Briceño, Armando Ríos, Miller Perdomo, Carolina Ramírez, Autodefensa Gaitanistas de Colombia (Clan del Golfo), Segunda Marquetalia, Comando de Frontera y Ejército Bolivariano.
La Fuerza de Tarea Omega cuenta con tres unidades Operativas Menores y 15 unidades tácticas. Expertos en materia de defensa nacional aseguran que estas órdenes terminan dándoles ventaja a los criminales, debido a que no se puede hacer una operación planeada contra los cabecillas y los integrantes de dichas organizaciones al margen de la ley.
SEMANA consultó con fuentes militares, que indicaron que el documento es parte del cumplimiento de las órdenes presidenciales del pasado mes de diciembre, cuando el mandatario Gustavo Petro decretó un cese bilateral al fuego con varias estructuras criminales del país.
La respuesta oficial del Comando General de las Fuerzas Militares señala que, “en relación a un radiograma de la Fuerza De Tarea Conjunta Omega, sobre la suspensión de operaciones ofensivas contra grupos armados organizados, el Comando General de las Fuerzas Militares se permite aclarar que este hace referencia únicamente al cumplimiento de las directrices emitidas en los decretos gubernamentales del cese al fuego bilateral de carácter nacional”.
Añade la autoridad que “lo anterior no implica dejar de cumplir la misión constitucional de continuar trabajando por la defensa, seguridad y bienestar de la población civil a lo largo y ancho de la geografía nacional”.
El pasado mes de enero, el comandante de las Fuerzas Militares, el general Helder Giraldo, indicó a sus hombres: “A los comandantes les pido que motiven a sus hombres, incrementen la moral de nuestros soldados, lean y entiendan nuestro Plan de Campaña Ayacucho, cumplan con el proceso de las operaciones, tengan una absoluta fe en Dios, trabajen en incrementar la confianza entre ustedes y sus soldados”.
Añadió el oficial que “las Fuerzas Militares de Colombia comprometidas con la paz total y conforme a los lineamientos del señor presidente de la República en consideración a lo dispuesto en los Decretos N.º 2656, N.º 2658, N.º 2659 y N.º 2660, fechados 31 de diciembre de 2022, en cuanto al Cese al Fuego Bilateral y Temporal de Carácter Nacional, en el marco de los diálogos de carácter político en los que se pacten acuerdos de paz con el ‘Estado Mayor Central Farc-EP’ y acercamientos y conversaciones para el sometimiento a la justicia y el desmantelamiento entre el Gobierno nacional y las siguientes organizaciones, respectivamente: ‘Autodefensas Gaitanistas de Colombia - (AGC)’, las ‘Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada - (ACSN)’ y ‘Farc-EP, Segunda Marquetalia, Comando de Frontera Ejército Bolivariano (CDF-EB), (Coordinadora Guerrillera del Pacífico - Segunda Marquetalia’, darán cumplimiento a lo allí establecido”.
Así mismo, indicó el oficial que “cada comandante en todos los niveles deberá impartir órdenes en cuanto a suspender acciones ofensivas y evitar incidentes armados entre las Fuerzas Militares y los grupos previamente descritos (Estado Mayor Central Farc-EP, Coordinadora Guerrillera del Pacífico Farc-EP- Segunda Marquetalia, Autodefensas Gaitanistas de Colombia – (AGC) y las Autodefensas Conquistadores de la Sierra Nevada-(ACSN) y verificar que las órdenes lleguen a todos los niveles de las cadenas de mando”.
Además, el alto mando ordenó que “cada comandante debe llevar un registro diario (desde el 01 de enero de 2023) de las actuaciones de los grupos previamente referenciados ubicados en su área de responsabilidad, con el fin de anticipar situaciones que puedan poner en riesgo a la población civil, afectar a las propias tropas, el cumplimiento de la misión constitucional y el desarrollo del proceso de paz”.
Es de recordar que el Gobierno busca mantener el cese al fuego con dichas estructuras criminales hasta mitad de año de este 2023. El Clan del Golfo, las disidencias de las Farc de Iván Mordisco, la Segunda Marquetalia de Iván Márquez, y Los Pachenca, hacen parte de los beneficios militares otorgados por el Gobierno.
Clan del Golfo asegura estar dispuesto a sumarse a la ‘paz total’ del Gobierno Petro
Por medio de un comunicado, el Clan del Golfo o Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) anunciaron que están interesados en sumarse al proyecto de la ‘paz total’ del presidente Gustavo Petro.
“Después de un consenso unificado entre el Estado mayor, hemos contratado los servicios profesionales de abogados y por ende conferido poder amplio y suficiente para que adelanten acercamientos, exploraciones, y de ser el caso, negociación jurídica en nombre del Estado mayor de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia AGC”, aseguraron.
Según dijeron, lo hacen porque están atendiendo el llamado del Gobierno nacional a la ‘paz total’ como una política de Estado y que están dispuestos a sumarse a las negociaciones “que haya lugar” bajo los estándares de la Constitución Política y tratados internacionales.
“Por lo tanto, están plenamente facultados en todo lo que tenga relación directa y/o indirecta con la ‘paz total’”, afirmaron, haciendo referencia a los abogados. Además, aclararon que ninguno de ellos pertenece ni ha pertenecido a las AGC ni a ningún bloque del Estado mayor.
“La designación se hace de buena fe y con el ánimo de contribuir a la paz de Colombia”, señalaron.
Cabe recordar que hace pocos días fue asesinado Wilmer Antonio Giraldo, alias Siopas, uno de los máximos cabecillas de ese grupo criminal. El líder de la organización recibió 13 disparos en el cuerpo, el rostro fue completamente desfigurado y el cadáver fue abandonado en medio de una carretera, en el municipio de Dabeiba, departamento de Antioquia.
Por su parte, el máximo líder de esa organización criminal, Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, se encuentra preso en una cárcel de máxima seguridad en Estados Unidos.
El presidente Gustavo Petro había anunciado el 31 de diciembre un cese al fuego con cinco organizaciones armadas ilegales, entre ellas las AGC. También mencionó a la guerrilla del ELN con la cual se adelantan negociaciones, pero ese grupo armado desmintió al mandatario.
A pesar de ese anuncio se han venido registrando hechos violentos por este grupo armado. En los últimos días, por ejemplo, 40 empleados de una empresa minera fueron secuestrados en Antioquia por miembros de esa organización criminal, según confirmaron fuentes del Ejército Nacional.
El secuestro habría estado enmarcada en el paro que se adelanta en esta subregión, con el fin de rechazar los operativos que hace la fuerza pública contra la minería ilegal. En particular, hombres del Clan del Golfo son señalados de protagonizar esta emergencia.
Sumado a esto, en el mes pasado también se registró una violenta represalia del Clan del Golfo contra miembros de la Fiscalía luego de que ese organismo se negara a levantar las órdenes de captura contra los cabecillas de esa guerrilla.
Según la información compartida por la Fiscalía, 12 hombres fuertemente armados secuestraron e interrogaron a tres fiscales de la Dirección Seccional Antioquia y a otra funcionaria de un juzgado de Tarazá. Las víctimas se desplazaban en un vehículo particular en la vía que conduce de Cáceres a Medellín, a la altura de Valdivia (Antioquia).
Ante lo ocurrido, la Fiscalía aseguró que “se logró evidenciar que una de las personas que los tuvo secuestrados fue José Gonzalo Sánchez Sánchez, alias Gonzalito, máximo cabecilla del Clan del Golfo en la zona, quien actualmente tiene orden de extradición vigente y es parte de los 16 nombres con orden de captura, que pidió el Gobierno, fueran levantadas. Petición a la que no accedió la Fiscalía por no existir ningún marco constitucional para hacerlo”.
El Clan del Golfo ha seguido sembrando terror en otras regiones del país, entre ellas, el bajo Cauca antioqueño en donde han puesto panfletos y grafitis.
El hecho fue rechazado por los pobladores, quienes atemorizados aseguraron que estas estructuras están aprovechando el cese al fuego decretado por el Gobierno nacional para seguir intimidando a la comunidad.
El grupo armado lo hizo para celebrar el natalicio del líder político Jorge Eliécer Gaitán. Algunos han reclamado que la fuerza pública estaría maniatada para atender estos casos luego de que el presidente Petro anunciara el cese al fuego con esta y otras organizaciones al margen de la ley.