Al parecer el único pecado del exsubirector de riesgo de Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Sneyder Pinilla, no fue solo ser parte del multimillonario escándalo de corrupción que se tomó la entidad, de donde habrían sacado dinero para comprar la conciencia de congresistas. Además, habría usado su cargo e influencia para participar en política apoyando a un candidato a la alcaldía, algo que está prohibido para funcionarios públicos.

Por eso, la procuraduría General de la Nación profirió pliego de cargos contra el exsubdirector de Manejo de Desastres de la (UNGRD), Sneyder Pinilla Álvarez, por participación indebida en política.

“Según la delegada de instrucción, el exfuncionario habría utilizado su cargo e imagen para apoyar la campaña electoral de Darío Buchenicow Caballero, quien aspiraba a la alcaldía del municipio de Sabana de Torres, Santander, para el periodo 2024-2027, cargo al que finalmente accedió tras la jornada electoral del 29 de octubre de 2023″, informaron desde la Procuraduría.

De acuerdo con la investigación disciplinaria, Pinilla Álvarez se desplazó hasta ese municipio el 27 de octubre de 2023, dos días antes de los comicios, para aparentemente revisar aspectos relacionados con la intervención en puntos neurálgicos del río Lebrija y reunirse con miembros de la comunidad.

Y es que no era para menos, Pinilla tenía la capacidad de, como se hizo con el dinero que sacaron para comprar la conciencia de los presidentes de Senado, Iván Name, y de Cámara, Andrés Calle; y los nueve congresistas de la Comisión de Crédito Público, sacar dinero destinado a emergencias para viabilizar obras públicas, sin necesidad de cumplir la ley de contratación pública.

Según documentó la Procuraduría, “en los días de su desplazamiento, el funcionario publicó en su cuenta de la red social Facebook fotografías y frases como “nos tomamos Sabana de Torres” y “volvimos con más fuerza”, escritas en los colores que identificaban la campaña electoral de Buchenicow Caballero, manifestaciones que, para el órgano de control y en atención al contexto electoral que se vivía, “fueron usadas por el funcionario para avivar los ánimos de los electores y, de forma indirecta, buscaban anunciar su respaldo a una campaña electoral”.

Además, el emproblemado exsubdirector de la UNGRD, quien es hoy la piedra angular del escándalo de corrupción en la entidad y está delatando cómo participaron incluso miembros del alto gobierno, habría viajado a apoyar la campaña de Buchenicow Caballero sin contar con la comisión que lo facultara para desplazarse fuera de su sede habitual de trabajo a desempeñar labores, razón por la cual “su presencia en ese municipio no se relacionaba con el ejercicio de sus funciones al no estar comisionado para ese efecto”, sostuvo el Ministerio Público en el pliego de cargos.

Para el órgano de control “la actuación del disciplinable implicó un quebrantamiento sustancial de la prohibición de influir en el proceso electoral 2024-2027, pues si bien los servidores públicos tienen derecho a participar en procesos electorales a través del sufragio, les está prohibido utilizar el cargo o función para participar en las contiendas electorales, por cuanto afectan, entre otros, los principios de moralidad e igualdad”.