En Colombia solo se recicla 7 por ciento de los plásticos de un solo uso. Esto significa que el país está por debajo del promedio mundial, que, según la ONU, es del 9 por ciento. Durante el foro ‘El futuro de los plásticos en Colombia’, expertos y representantes del sector analizaron el panorama nacional y compartieron algunas iniciativas que están ayudando a transformar esta realidad.
Juan Carlos Losada, representante a la Cámara y autor de la Ley 2232 de 2022, señaló en medio del evento que con esta legislación se busca una erradicación gradual de los plásticos de un solo uso; por ejemplo, las bolsas de punto de pago, pitillos, copitos, envases o empaques y recipientes para contener o llevar comidas o alimentos no preenvasados, entre otros. Según el congresista, “El salvavidas para aquellas empresas que forman parte de esta industria será ponerse la camiseta de la sostenibilidad. Para que puedan seguir produciendo, deberán ser capaces de recoger ese material, ponerlo en un circuito de economía circular y así ser una industria que tenga una huella plástica cero”.
Si bien en Acoplásticos reconocieron que el país tiene una problemática con el final de la vida útil de este tipo de materiales, afirmaron que esta industria representa 220.000 empleos directos. Además, señalaron que entre 2019 y 2021 la capacidad instalada para la industria de reciclaje de plásticos creció 40 por ciento en el país con el objetivo de mitigar este fenómeno.
María Alejandra González, coordinadora regional de política de plásticos para América Latina y el Caribe de WWF, resaltó que la industria debe repensarse desde las distintas etapas de la cadena de valor y explicó la necesidad de pasar de un modelo lineal de producción, consumo y desecho rápido a uno circular.
Por su parte, el gerente de la cadena de valor del plástico de Cempre, Mario Muñoz, recalcó que la economía circular no es solo reciclaje. Sostuvo que el país tiene una gran oportunidad para armonizar toda la cadena valor y la ley será un eje clave para aumentar las tasas de reciclaje de estos materiales.
Desde el sector privado, empresas como Darnel, Coca-Cola, Carvajal, Enka, Esenttia y Arclad han puesto a la economía circular como un pilar fundamental para el desarrollo de sus actividades. Darnel, por ejemplo, desde 2018 fabrica una línea de productos resq®, que tienen como mínimo un 70 por ciento de plástico reciclado posconsumo. Coca-Cola, con su estrategia Un Mundo sin Residuos, busca recolectar y reciclar para 2030 el ciento por ciento de las botellas, latas o empaques que ponen en el mercado, fuera de trabajar en el ecodiseño de sus envases.
Ana Milena Muñoz, vicepresidenta de Sostenibilidad y Economía Circular de Carvajal S. A., invitó a la industria a entender que las oportunidades del plástico no solamente se refieren al PET. Para que el plástico tenga una cadena de transformación y de aprovechamiento de economía circular, cada uno necesita un proceso, un aprendizaje y un acompañamiento. “Primero, para que el consumidor pueda separarlo en la fuente. Segundo, para que la misma industria lo pueda reutilizar”, afirmó.
Tomar medidas urgentes a fin de mitigar el impacto del plástico será vital para alargar la vida de las especies y de los ecosistemas. Según el Foro Económico Mundial, en 2050 habrá más plástico que peces en el océano. Es por esto que el evento, organizado por Arclad, Organización Carvajal, Coca-Cola, Darnel, Enka y Esenttia, concluyó con la urgencia de transformar esa mentalidad de consumo por una más responsable y amigable con el medioambiente.