Si en las conversaciones entre el Gobierno y las FARC en Cuba han sucedido hechos insólitos, lo único que faltaba es que aparecieran los paramilitares. Y eso fue lo que ocurrió este jueves, con una carta que dos de sus más destacados representantes le enviaron al presidente Santos. Salvatore Mancuso, el otrora poderoso comandante de las AUC que ahora está preso en Estados Unidos, y Edwar Cobos, alias 'Diego Vecino', tras las rejas en Colombia y a punto de salir libre por cumplir su pena alternativa, dirigieron una sorpresiva misiva al presidente Santos en la que se declaran víctimas de las FARC y piden ser tenidos en cuenta en los diálogos de La Habana. Al mismo tiempo, y por primera vez, en la carta reconocen que el paramilitarismo fue una política de Estado. “Hicimos parte de una política de Estado para enfrentar y combatir a la guerrilla”, dicen, aceptando que hicieron “mucho daño” a la sociedad. Esta es la primera ocasión que hablan de esto jefes paramilitares de la talla de Salvatore Mancuso, el cordobés de origen italiano que comandó las Autodefensas Unidas de Colombia junto a Carlos Castaño. En la extensa misiva, que también enviaron al fiscal general, al procurador y a varios organismos internacionales, ambos manifiestan que, con su experiencia en el conflicto, pueden ser una herramienta clave en los diálogos de paz en Cuba. “Fui víctima de las guerrillas en Colombia y objeto de extorsiones, amenazas, atentados, hurtos, abigeato, etc., por parte de las FARC desde comienzo de la década de los 90. Desde esa época vi morir por cuenta de la guerrilla a muchos amigos y a otros los observé abandonar sus propiedades. Soy víctima del accionar de la guerrilla de las FARC”, señala Mancuso en la misiva. Como muchos otros perpetradores de violencia en Colombia, y como los mismos jefes de las FARC lo han hecho desde La Habana, el comandante de las autodefensas y autor de incontables masacres y asesinatos se declara, a su vez, “víctima”. Por su parte 'Diego Vecino' asegura: “Fui víctima de la guerrilla colombiana desde cuando era solo un niño. A la edad de los 12 años recibí un disparo en la cabeza de manos de un guerrillero del frente 20 de las FARC. Luego, en dos oportunidades fui secuestrado. La primera vez por el frente 37 de las FARC, secuestro del cual me fugué después de sufrir vejámenes. El segundo secuestro fue a manos de un reducto del ELN. Esa vez, pagué para que me liberaran. Soy víctima de la guerrilla de las FARC y del ELN”, precisa alias 'Diego Vecino'. Ambos antiguos paramilitares piden ser escogidos entre los que se sentarán en la mesa de negociación en Cuba en calidad de víctimas y como antiguos actores del conflicto armado. “Estamos completamente seguros de que por la doble calidad víctimas-victimarios que ostentamos, nos permitirán aportar de manera decisiva en la construcción del camino de la reconciliación”, dice. Los dos jefes paras llaman a las FARC y al Gobierno a no levantarse de la mesa hasta lograr un acuerdo y piden “participar presencialmente de ese gran encuentro de perdón y reconciliación mutuo entre guerrilleros y ex AUC, con quienes en el pasado también nos hicimos daño y les causamos tanto dolor a nuestras familias”, dicen en su carta. No es la primera vez que los paramilitares piden ser tenidos en cuenta en los diálogos entre el Gobierno y la guerrilla. No está claro si el Gobierno o las FARC están interesados en incluirlos.