En la tarde de este viernes, 18 de agosto, se conoció sobre una grave situación con un piloto de parapente que volaba sobre el cielo de Cerrito Valle. El hombre habría perdido el control en pleno vuelo y fue cuando se generó la emergencia.
De acuerdo con la información preliminar, el deportista tendría una costilla rota. Además, habría caído sobre un incendio en la zona, y debido a su situación de salud no puede salir de este. Hay riesgo de que las llamas lo alcancen.
“Necesitamos ayuda de la fuerza aérea para salvar al hombre. Estamos en la zona con Bomberos Palmira, pero las condiciones por la montaña son difíciles, por favor que alguien nos ayude, pues las llamas las tiene muy cerca y él está inmóvil”, dice un hombre por medio de un audio, que al parecer está en la zona.
Asimismo, resalta que en la zona se escuchan los gritos del piloto. “Se escucha preocupado, por favor que nos ayude, el parapente es azul”, finaliza.
Por ahora, las autoridades competentes no se han manifestado sobre este hecho.
Parapentista estuvo ocho horas atrapado en cables de alta tensión de energía: así lo rescataron
Como una emergencia de película describieron los organismos de socorro el rescate de un parapentista que quedó atrapado en unos cables de alta tensión de energía en el departamento del Valle del Cauca, el pasado mes de marzo.
Fueron más de ocho horas las que estuvo atrapado un hombre identificado como Ricardo Bedoya, quien tiene 47 años y es odontólogo de profesión, en jurisdicción del municipio de Ansermanuevo.
El parapentista quedó suspendido, aguardando, en muchos momentos, por un desenlace fatal. Sin embargo, el rescate se hizo posible en medio de las dificultades.
Hacia las 2:45 p. m. del sábado 11 de marzo el cuerpo de Bomberos de Ansermanuevo fue informado sobre la emergencia. De inmediato, las unidades se trasladaron al lugar, pero no podían actuar hasta que la empresa encargada del servicio de energía suspendiera el servicio. Intentar una maniobra en esas condiciones habría causado una tragedia mayor.
“En el sitio había un familiar que hizo contacto vía telefónica con él y le manifiesta estar bien. Luego, se llama a los encargados del servicio de energía para que la suspendan, pero manifiestan que necesitan unos equipos que estaban en Cali”, relató Guillermo Gutiérrez, comandante de Bomberos de Ansermanuevo.
Con el hombre colgando en el aire, mientras el parapente seguía enredado en los cables de energía, pasaron las horas. Justo debajo de él, los Bomberos instalaron un puesto de control y recibieron de otros organismos, entre ellos sus iguales de la ciudad de Pereira, Risaralda.
El desespero se apoderó de curiosos que llegaron al lugar, quienes le exigían a los rescatistas bajar rápidamente al parapentista, sin comprender que podían hacer hasta que fuera suspendido el servicio de energía por parte de la empresa encargada.
Seis horas tuvieron que pasar para que esto ocurriera y estuvieran dadas las condiciones para iniciar con el rescate del hombre. Los trabajos en la altura para bajarlo en perfectas condiciones se extendieron dos horas más. Pasadas las 11:00 p. m., Ricardo Bedoya se encontraba en tierra firme. Tanto él como los rescatistas involucrados resultaron ilesos en las maniobras.
“Hubo momentos de tensión con la comunidad, que exigía bajar rápidamente al parapentista. Sentíamos impotencia, no podíamos subir pese a estar preparados y tener los equipos necesarios, porque las cuerdas estaban energizadas y no podíamos hacer nada hasta que descargaran las torres de energía”, confesó el comandante del cuerpo de Bomberos de Ansermanuevo, quien además pidió mayor comprensión con los organismos de socorro en este tipo de situaciones.