Cuatro. Ese es el número de semanas que completa el paro camionero en el país, una protesta en la que cerca de 150.000 transportadores piden al Gobierno una solución a los problemas que aquejan al gremio, como el incremento en los precios de los peajes y la gasolina.Los camioneros piden que se revisen las bajas tarifas (fletes) que les pagan las empresas por la movilización de la carga. Dicen que estas no se compadecen frente a los elevados costos operativos del sector (precios del diésel, mantenimiento de vehículos, peajes, seguros).Le puede interesar: El eterno problema Ellos no piensan dar su brazo a torcer. Por eso, no acabarán el paro hasta lograr acuerdos con el Gobierno. Ante la situación, el ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas Giraldo, los convocó este viernes a las 4:00 p. m. para una reunión de cierre que ponga fin a esta situación.“Creemos que las condiciones están dadas, creemos que Colombia no puede tener un paro indefinido porque lo que se ha propuesto y concertado con el gremio en el tema económico, de chatarrización y social va a mejorar las condiciones del transportador de carga sin darle un golpe a la canasta familiar”, dijo el ministro.Según Rojas, después de más de 17 sesiones con los transportadores, ha logrado entender y analizar la problemática del sector. “La reunión no se detendrá hasta que lleguemos a un acuerdo”, recalcó.Se espera que se logre pronto un acuerdo, pues la situación se está tornando cada vez más compleja. El puerto de Buenaventura es uno de los más afectados.El gerente de la Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura, Víctor Julio González, reveló esta semana que, por cuenta de la protesta camionera, la terminal marítima opera tan solo a un 60 % de su capacidad y el represamiento de mercancía se torna crítico, ya que hay unas 100.000 toneladas de granos que no se han podido evacuar, especialmente insumos del sector avícola y porcícola.A ello se suma que por motivo de las obras de la doble calzada Buenaventura-Buga (Valle del Cauca), desde hace varios meses se viene aplicando un cierre parcial diario por cerca de diez horas, para facilitar algunos trabajos.Le recomendamos: Nadie le pone el pecho a la crítica situación de BuenaventuraEsto no es todo. La Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC) advirtió que, como no es posible movilizar la producción, es probable que se registre un aumento en los precios de los productos básicos de la canasta familiar.De hechpo, esta situación empezó a hacerse evidente en Antioquia. Allá, en la Central Mayorista, el principal centro de abastos de la región, empezaron a escasear productos básicos de la canasta familiar, como la papa capira, el mango, la cebolla y el cilantro.En las vías que conducen a la costa Caribe y a Nariño es evidente el represamiento de alimentos. De acuerdo con la Central, esto ha llevado a un incremento en los precios de productos, en algunos casos, hasta del 43 %, como con el cilantro.