Para este miércoles, 22 de febrero, las diferentes agremiaciones de taxistas convocaron a un paro nacional, en el que se manifestarán contra los altos precios de la gasolina, las plataformas de movilidad no reguladas, entre otras razones.
Se esperan concentraciones este miércoles en diferentes puntos de Bogotá, Medellín, Cali, Cúcuta, Manizales, entre otras.
Por ejemplo, en Cali, Johnny Rangel, director del gremio de taxistas La Mancha Amarilla, dio a conocer el plan de los conductores en la capital del Valle del Cauca para este día.
Los taxistas en Cali van a aglomerarse en Sameco, Menga, Alfonso López, Ciudad Jardín, Paso del Comercio, Portada al Mar, terminal de transportes, centro de la ciudad e inmediaciones a centros comerciales.
El paro nacional de taxistas fue convocado para rechazar el transporte informal y las alzas en los precios de los combustibles, y solicitar la creación de un “régimen sancionatorio que haga cumplir las leyes”.
Vale la pena recordar que el Ministerio de Transporte anunció el viernes que se sentaría a la mesa con los taxistas, para encontrar salidas a sus reclamos. La invitación del Ministerio apunta a que el diálogo se adelante el 21 de febrero, unas horas antes de la protesta prevista para el martes.
Según comunicado del Ministerio de Transporte, esa entidad tiene toda la disposición de dialogar para buscar soluciones concertadas. De hecho, el jefe de la cartera de Transporte, Guillermo Reyes, adelantó que anunciará avances y reconocimientos ese 21 de febrero.
El encuentro se llevará a cabo con participantes, tanto de manera virtual como presencial, a las 2:00 p. m., en las instalaciones del Ministerio.
De parte del Gobierno, a la mesa de concertación llegará representantes de los ministerios de Trabajo, TIC y Ciencia y Tecnología: “El Ministerio de Transporte estará a la espera de la designación de los voceros de los promotores de la movilización denominada F22, con el objetivo de escuchar las solicitudes y motivaciones que los llevan a promover la jornada”.
Una de las tendencias que están teniendo los sindicatos y voceros de sectores de la economía son las claras divisiones para -según ellos- defender los intereses de los trabajadores y sus familias. Se ha visto así entre los representantes de los taxis amarillos. A finales de enero, la protesta anunciada echó reversa, luego de una mesa de diálogo con el Gobierno distrital, en el que participó Hugo Ospina, quien llevó la voz, por una parte, de los taxis amarillos, lo que se evidenció en las intervenciones de otros representantes de taxistas que lo catalogaban como “una rueda suelta en el sector”.
No obstante, para esa oportunidad, pusieron sobre la mesa el hecho de que son 1.000.000 de familias que dependen de ese negocio, el cual se vería afectado por la aprobación y regulación de las plataformas de vehículos particulares en Colombia.
Es así como, en esta ocasión, Ospina, quien anteriormente había hablado en medios, acerca de bloquear de los aeropuertos, dijo esta vez que la organización gremial que lidera, no va a participar en el paro. Es más, catalogó la jornada como “netamente política e, incluso, entre los convocantes hay hasta un concejal”.