Oswaldo Ibáñez Herrera, conocido como ‘el Flaco’, fue detenido por las fuerzas del Ejército Nacional en el corregimiento Puerto Bélgica del Municipio de Cáceres, en Antioquia, al encontrarse en posesión de una granada de fragmentación que, aparentemente, estaba utilizando para intimidar a los comerciantes y obligarlos a cerrar sus negocios.

Según la investigación realizada por un fiscal especializado de la Seccional Antioquia, alias el Flaco podría ser el jefe urbano del Clan del Golfo en el mencionado corregimiento, y estaría coaccionando a algunos residentes para que se unieran a las manifestaciones durante el paro minero en la región.

Alias el Flaco fue capturado en flagrancia con una granada de fragmentación en Antioquia (referencia) | Foto: Policía Metropolitana de Cartagena

La Fiscalía General también está evaluando si Ibáñez Herrera estuvo involucrado en el secuestro de dos jóvenes del área que, presuntamente, fueron forzados a unirse a la organización criminal.

El ente acusador logró que se impusiera medida de aseguramiento en su contra por el porte ilegal de armas o explosivos de uso privativo de las Fuerzas Militares.

Clan del Golfo, detrás del paro minero

El presidente Gustavo Petro tomó un paquete de medidas para atender la profunda crisis de orden público que se registra en el Bajo Cauca, entre los departamentos de Cauca y Antioquia, que tiene atemorizada a su población, por la quema de ambulancias y bloqueos de las principales vías en medio del paro minero.

En la tarde de este domingo, el jefe de Estado fue directo en señalar, al término de un consejo extraordinario de seguridad en Montelíbano, Córdoba, que existen indicios de que detrás de los desmanes está el Clan del Golfo, por lo que anunció que la fuerza pública custodiará la zona de manera indefinida.

Presidente Gustavo Petro, en consejo de seguridad por el paro minero, afirmó que el Clan del Golfo está detrás | Foto: Presidencia

Ante esa situación, el jefe de Estado ordenó a la fuerza pública permanecer de manera indefinida en los terrarios afectados por el paro minero en Córdoba y Antioquia, para liberar a las comunidades confinadas por la zozobra de los ataques contra la población.

“Todas las vías están bajo control, queda un tramo de árboles que tapona uno de los trayectos que aún permanece afectados, pero se está trabajando en ello, estamos removiendo los últimos obstáculos de Cáceres a Tarazá”, sostuvo Petro.

Y añadió en su declaración que “la presencia de la fuerza pública, que es masiva, se va a mantener en todo territorio liberado de organizaciones ilegales armadas, sean que las que quieren la paz o las que se combaten, permanecerá la presencia del Estado”.

Petro cerró la puerta de una negociación de paz

El presidente de la República se cansó y aseguró que por ahora se cierra la puerta de una negociación de paz con el Clan del Golfo, al advertir que ese grupo armado al margen de la ley está privilegiando sus negocios ilícitos y ataques a la población.

El mandatario colombiano indicó que la fuerte postura de su Gobierno del Pacto Histórico en contra del Clan del Golfo, es por la posposición radical violenta que ha asumido pese a los llamados para que ingresen a su política de la ‘paz total’.

Presidente Petro y violencia impuesta por el Clan del Golfo en el Bajo Cauca antioqueño | Foto: Foto 1: Semana; Foto 2: cortesía API.

“Unos impactos absolutamente agresivos contra la misma población que se llevó, aguantan muchos por miedo, otros por dinero y por eso tenemos la situación de hoy”, sostuvo Petro en diálogo con la emisora de la Presidencia.

Y agregó el jefe de Estado: “Literalmente el Clan del Golfo no fue capaz de dar el paso hacia un sometimiento colectivo a la justicia que se estaba preparando jurídicamente, parece privilegiar más sus negocios y mantenerse en sus negocios”.

“Por ahí no hay una posibilidad de negociación hasta que eso no vuelva voluntad política en el corazón de las personas que están en la ilegalidad, entonces la paz tendrá esas dificultades”, subrayó el mandatario colombiano.