Las imágenes de civiles armados durante las jornadas de protesta del pasado 28 de mayo que abrían fuego contra los manifestantes con complicidad evidente de la Policía, en la ciudad de Cali, permitieron la identificación de varias personas, entre ellas el empresario Andrés Escobar, que horas después de verse en las imágenes salió a través de sus redes sociales a pedir disculpas y explicar que el arma que portaba era traumática y no de fuego, por tanto su intención no era asesinar a algún manifestante. Aún con las explicaciones la Fiscalía lo citó a interrogatorio. Pero, ¿Qué ha pasado con esa investigación? se preguntan quienes ahora lo vieron de vacaciones.

Andrés Escobar tuvo que asistir con su abogado para rendir las explicaciones del caso: ¿Por qué portada esa arma? ¿Por qué disparaba contra los manifestantes?, además de establecer el daño o las consecuencias de sus disparos. Escobar habló con Semana y dijo que la situación ese 28 de mayo era caótica, algunos policías trataban de aliviar el escenario pero los manifestantes se acercaban a un CAI con la intención de atacarlo.

“Cuando llegó al puente de la carrera 102, donde está el CAI de Policía, encontramos que había muy pocos efectivos y eran demasiados los que venían de la zona de los manifestantes. Estaban avanzando y había un policía ondeando una bandera blanca en símbolo de paz para tratar de alivianar los ánimos, pero no sirvió, ellos siguieran avanzando se sintió pánico y peligro extremo que es cuando tomo la decisión de hacer unos disparos de disuasión al aire con mi arma traumática, no letal”, dijo el empresario en entrevista con Semana.

Escobar rindió el interrogatorio en fechas que no fueron referidas por la Fiscalía tras considerar una situación de riesgo por las constantes amenazas que recibió luego de que su nombre y foto aparecieron en todos los medios del país. Sin embargo, se conoció que en la declaración reiteró lo que dijo en Semana sobre la situación de riesgo que vivía en ese momento y así mismo los uniformados que estaban en ese espacio.

“La tenía conmigo porque digamos que se ha generado una situación de inseguridad sin precedentes en Colombia y en especial en Cali, que ha sido el epicentro de toda esta problemática. Es para salvaguardar mi integridad física y la de mi familia”, dijo Escobar.

Como el empresario reapareció en sus redes sociales y de vacaciones, las críticas y reclamos a la Fiscalía sobre los avances en la investigación, también se reflejaron. Incluso algunos políticos compararon la situación con un acto de impunidad, tras considerar que ha pasado un mes y aún no se conocen decisiones al respecto.

Desde el ente acusador explicaron que se trata de una investigación, que requiere de la recuperación de material de prueba, más allá de las imágenes donde se ve a Andrés Escobar disparando un arma. “Se debe establecer qué tipo de arma, no es suficiente con que el mismo interrogado diga que es un arma traumática, todo debe investigarse y sobre todo comprobarse”, explicaron fuentes de la Fiscalía.

El asunto, en criterio del ente acusador, es que no pueden acelerar un proceso judicial de acuerdo a la presión de algunos sectores políticos, porque ante un juez se muestran pruebas, no trinos, evidencias, no comentarios en redes sociales. En ese mismo sentido se tiene que confirmar el daño o las consecuencias que dejaron los disparos de Escobar en contra de manifestantes.

Ahora qué pasa después del interrogatorio. La Fiscalía explicó que esa diligencia de interrogatorio no sólo es la oportunidad que tiene Escobar para defenderse, sino que le permite a los investigadores avanzar en otros elementos de prueba, conocer realmente lo que ocurrió y contrastarlo con otras declaraciones. Una vez se termine esa recuperación de pruebas, la Fiscalía tendrá que determinar si llama a imputación de cargos al empresario o por el contrario archiva la investigación.