Una multa de 32 millones de pesos tendrá que pagar el pasajero que amenazó a toda una tripulación en el vuelo 11-24 que tenía la ruta Barranquilla-Miami (Estados Unidos) en hechos registrados en la noche del pasado viernes 3 de junio. Por este suceso, la aeronave de la empresa American Airlines tuvo que regresar al aeropuerto Ernesto Cortissoz en la capital del Atlántico.
El pasajero fue retenido por las autoridades del aeropuerto. Luego de evaluar la situación, la Policía Metropolitana de Barranquilla, aplicando el artículo 146 de la Ley 1801 de 2016, fijó la multa al considerar que se había presentado un acto que afectó la convivencia.
En el video publicado por redes sociales se ve cómo el hombre, que habla con un inglés británico, ofende en repetidas oportunidades al personal dentro del vuelo. Cuando es retirado por el azafato, los pasajeros aplauden.
Antes de retirarse, el hombre se encontró cara a cara con el piloto, quien lo reprende por su mal comportamiento y le pide que se retire de inmediato. Los testigos de los hechos indicaron que el pasajero se enfrentó con las otras personas y tripulantes, amenazando con lanzarse si no accedían a sus pretensiones.
En la narración de los hechos se señala que el pasajero, cuya identidad y nacionalidad se desconocen, estaba bajo los efectos del alcohol y quería seguir ingiriendo bebidas alcohólicas dentro del avión.
“Él había estado tomando en el bar del Ernesto Cortissoz de Barranquilla y abordó en completo estado de embriaguez. En un momento, amenazó a varios miembros de la tripulación, y posteriormente, se tomó la determinación de regresar a Barranquilla”, detalló el periodista Jorge Cura.
El momento álgido del enfrentamiento se presentó cuando el pasajero les pidió a las azafatas el servicio de alimentación, sin embargo, ellas le señalaron que no tenía acceso al mismo y que debía pagar una suma de dinero.
“Este es un pasajero familiar de un empleado de la compañía y tiene acceso a tiquetes beneficio; sin embargo, en este caso no le cubre la alimentación, el hombre se alteró y empezó a increpar al auxiliar de vuelo, razón por la que el capitán ordenó su descenso y el vuelo debió regresar a tierra”, le indicó una fuente del aeropuerto citada por RCN Radio.
La Policía de Barranquilla lo dejó disposición de Migración Colombia para que se inicie el respectivo proceso administrativo para establecer su situación y verificar si existen méritos para expulsarlo.
Hasta la fecha, ni el Aeropuerto Ernesto Cortissoz ni la empresa American Airlines han hecho mención a la situación ni las medidas que se tomaron para que este tipo de situaciones no se presenten nuevamente.
A raíz de la detención, los usuarios de las redes sociales cuestionaron la falla de un protocolo para atender este tipo de casos, igualmente manifestaron que de haber estado presentes en la aeronave habrían “golpeado” al pasajero “para que aprendiera”.
Igualmente, pusieron de presente el grave riesgo que representó para todos los pasajeros -señalando que había mujeres y niños- que una persona en ese estado haya podido subir al avión.