Momentos de pánico vivieron el pasado miércoles, 27 de noviembre, los pasajeros del vuelo AV9418 que cubría la ruta Pereira-Bogotá, luego de que la aeronave presentara un inconveniente en la pista de despegue del aeropuerto Matecaña poco antes de despejar, lo que obligó que las personas evacuaran de emergencia.

“Avianca informa que el vuelo AV9418, en la ruta Pereira -Bogotá, presentó una indicación técnica al momento del despegue, por lo que la tripulación, oportunamente, tomó la decisión de detener el vuelo y mantenerse en tierra”, aseguró la empresa en un comunicado.

En la aeronave había 168 personas, entre ellos los cuatro tripulantes, quienes salieron ilesos.

A través de redes sociales, se difundieron varios testimonios de los pasajeros que se encontraban en la aeronave en el momento de la emergencia.

“Fue horrible, de la nada todo se quedó sin luz. Escuché que el piloto dijo ‘evacuar, evacuar, evacuar’ y yo saqué mi maleta y pasé por encima y me tiré (...) Después de bajar la rampa, yo seguí corriendo porque la gente decía que eso iba a estallar”, dijo una mujer en un video compartido en la cuenta Pereira en vivo en la red Tiktok.

“La gente gritaba alrededor, decía que tenía miedo. Se veía mucho caos. Es algo que no voy a olvidar en mi vida. Creo que es un milagro”, agregó en su relato.

Otro hombre manifestó que la emergencia, al parecer, se habría producido por una falla en el motor. “Yo estaba en la parte del ala donde se produjo la explosión. Luego llegaron los bomberos y empezaron a apagar. La tripulación dijo que estuviéramos calmados y nos calmamos. Pero luego el piloto dijo que evacuáramos. La gente empezó a gritar, a correr, a coger las maletas”, dijo.

“Realmente fue horrible. Gracias a Dios pudimos salir bien y vamos a ver si nos reubican”, sostuvo desde una de las salas del aeropuerto Matecaña.

En las redes también se conoció un video que muestra a varios pasajeros evacuando la evacuando de emergencia el avión en medio de gritos.

Emergencia reciente

El pasado 31 de octubre otro vuelo de Avianca que cubría la ruta Bogotá-Madrid tuvo que aterrizar de emergencia por una serie de problemáticas presentadas durante sus operaciones. La aeronave sufrió un proceso de despresurización de su cabina, lo cual obligó a tomar medidas inmediatas.

Los sucesos ocurrieron cuando el avión se encontraba sobre el océano Atlántico y las alarmas de la aeronave se activaron indicando que la presión con la que se contaba en cabina estaba disminuyendo.

El piloto del vuelo inició los protocolos para este tipo de emergencias e informó a los 250 pasajeros que se encontraban a bordo. Por medio de las indicaciones dadas por el capitán, los usuarios mantuvieron la calma y se prepararon para el aterrizaje de emergencia.