La alcaldesa Claudia López, al término de un consejo de seguridad, se refirió este martes a las personas asesinadas y abandonadas en bolsas de basura en varios puntos de Bogotá.
De acuerdo con la mandataria, se trata de disputas por el narcotráfico y varios delincuentes responsables de los homicidios ya fueron identificados.
”Hemos tenidos seis casos de personas que aparecen asesinadas y abandonadas en espacio público, este tipo de hechos son fruto de confrontaciones por temas de narcotráfico en la ciudad, quiero que la ciudadanía -que por escabroso que sea- sepa que la Policía sabe por qué es, ya judicializó a los responsables de un caso, también hay dos casos que ya están identificados. Los otros tres casos ya estamos en investigación”, aseguró la alcaldesa López.
Ahora, frente a la posibilidad de que haya ‘casas de pique’ en Bogotá, López dijo: “Es falso, es desinformar que hay casas de pique en Bogotá, eso no existe, lo que ha ocurrido son casos de ajustamiento por narcotráfico”, dijo.
En igual sentido, el general Camacho afirmó que de momento las autoridades no tienen conocimiento que existan ‘casas de pique’ en Bogotá.
“De acuerdo a las investigaciones que nosotros tenemos con la Fiscalía, en Bogotá no hay casas de pique, sí hay unas afectaciones que están viviendo los mismos grupos criminales entre ellos por reacomodamiento por tráfico y venta de estupefacientes, pero no tenemos evidencia de un lugar exclusivo donde haya esta actividad de asesinato”, dijo el comandante de la Policía Metropolitana.
“Los cuerpos que han sido encontrados después de asesinados, ninguno presenta desmembramiento, presenta otras características de arma blanca, estrangulamiento, pero ninguno está desmembrado. Seguimos corroborando pero en el momento no hay ninguna evidencia que haya una casa de pique exclusiva para asesinar personas en la capital de la República”, afirmó el general.
No obstante, los detalles de la investigación que adelanta la Policía y que conoció SEMANA resultan aterradores. Las víctimas de una macabra práctica de intimidación entre organizaciones criminales, son torturadas y asesinadas en casas del centro de Bogotá. Se les llama las “casas de masajes”.
En lo corrido de este mes y en distintas partes de la ciudad fueron ubicados al menos seis cuerpos arrojados en bolsas de basura, en medio de escombros y desperdicios. Las víctimas, según Medicina Legal, tenían los mismos signos de violencia, de tortura y de mecanismo de muerte. Ese dato fue trascendental, como el hecho de encontrar una víctima con 162 heridas de arma blanca.
Las señas de tortura son al mismo tiempo un mensaje de advertencia entre organizaciones criminales dedicadas al tráfico de estupefacientes. Los asesinos reciben la orden y las víctimas son llevadas a las “casas de masajes”, donde son amarradas de manos y pies, torturadas y asesinadas.
A pesar de estos macabros casos en la ciudad, la alcaldesa aseguró que hoy en día Bogotá tiene la menor tasa de homicidio en el país. “Bogotá, comparada con las otras ocho principales capitales, es hoy la ciudad con menor tasa de homicidios”, dijo la mandataria.
A pesar de esta reducción en los casos de homicidios, la alcaldesa López reconoció que la ciudad tiene un gran dolor de cabeza con el aumento de los hurtos, y le pidió a la Policía y al Ministerio de Defensa que le entreguen los 1.000 policías adicionales que se le prometieron a la capital del país hace un mes cuando ocurrió el atentado terrorista en el CAI de Arborizadora Alta en Ciudad Bolívar, el cual dejó dos niños muertos y varios heridos.
“El hurto sigue siendo un dolor de cabeza, tenemos una afectación importante en atraco, por eso queremos rogarle a la Policía que nos cumpla la promesa del presidente Duque hace un mes y es que lleguen 1.000 uniformados adicionales a la ciudad”, dijo López.
La alcaldesa destacó el operativo para dar con los delincuentes que robaron las pertenencias de un conductor en el norte de la ciudad: “Se hizo posible por el comando anti atraco, pero Bogotá no necesita un comando, sino muchos comandos anti atracos, por eso le ruego a la Policía que nos entreguen esos 1.000 uniformados adicionales”, dijo la burgomaestre.