Si Gustavo Petro llega a ser presidente y cesa la contratación para la exploración de petróleo, sobrevendrían los siguientes males para Colombia: el dólar se dispararía por encima de $ 5.000 o $ 6.000; las importaciones se reducirían en más de US$ 15.000 millones; aumentarían los precios de los alimentos, de los medicamentos y de los insumos para el campo; habría desabastecimiento y aumentaría la pobreza.

Gustavo Petro, candidato presidencial por el partido Colombia Humana.

Juan Carlos Echeverry, quien aspira a la Presidencia por la coalición denominada Equipo por Colombia, se sorprendió con el anuncio de Gustavo Petro. “Petro está inspirado por las mismas tonterías, sandeces y necedades del régimen venezolano”, dijo Echeverry. Y advirtió que con esta propuesta del candidato de Colombia Humana, Colombia iría por la misma senda de destrucción y pobreza de Venezuela.

Echeverry habló con SEMANA y explicó los principales impactos negativos que la decisión de Petro tendría de manera inmediata para Colombia.

Canasta familiar

“No habría posibilidad de importar fertilizantes y fungicidas para el campo. Los precios de legumbres, frutas, hortalizas, carne y huevos, y toda la producción del campo, se encarecería. Quedarían por las nubes. Sería un golpe muy duro para los campesinos.

Habría una gran inflación en el sector de alimentos. Y, por supuesto, sería una inflación que afectaría a los más pobres.

Esa falta de divisas también afectaría la importación de los medicamentos de la India, de manera que las medicinas que necesitamos los colombianos, sobre todo los de mayor edad, se encarecerían y escasearían enormemente”.

Empleo

“El empleo colapsaría gravemente en los departamentos productores de petróleo. Y el empleo nacional también se vería muy impactado. Sería mucho más difícil importar maquinaria, lo que afectaría la capacidad de producción del país y la generación de empleo. Se destruirían empleos por todo el país”.

Impuestos

“Hoy por hoy la industria petrolera es la que mayor contribuye con impuestos al país. La caída en impuestos si eso llegara a ocurrir sería del orden de 15 % en impuestos. Tendríamos un déficit del orden de un punto del PIB, lo que OBLIGARÍA a tener que hacer cada año una reforma tributaria de esa magnitud. Habría que subir más los impuestos a los trabajadores y a los empresarios”.

Importaciones

“Las importaciones podrían caer en cerca de U$ 15,000 millones de dólares al año. Eso sería casi una tercera parte de todas las importaciones. Y nos llevaría a un colapso en la satisfacción de la demanda básica de los colombianos”.

Deuda pública

“Si el déficit aumenta, si no hay ingresos fiscales, el Gobierno tendría que salir a endeudarse para mantener su nivel de gasto. O tendría que cancelar programas sociales con familias en acción o los subsidios”.

Déficit presupuestal

“Habría un aumento sustancial del déficit por la caída de los ingresos. Podríamos tener un hueco fiscal de $ 15 billones”.

Precio del dólar

“La venta de petróleo significa ingresos de dólares a Colombia. Si la oferta de dólares se cae en US$ 15.000 millones no es exagerado pensar que tendríamos de inmediato un dólar por encima de $ 5.000 o $ 6.000 colombianos. Eso sería la pérdida de valor de todo”.

En pobreza

“La pobreza se dispararía a niveles no vistos hasta ahora. Tendríamos la mayor ola de protesta social. Los más afectados con una decisión como la que propone Petro son los pobres.

Por la falta de los dólares tendríamos comida más cara, celulares más caros, ropa más cara, medicamentos más caros. Todo sería más caro. Entraríamos de inmediato en una época de desabastecimiento de bienes de consumo básico para los más pobres”.

Menos comida

“Cuando usted deja de vender petróleo, de inmediato la principal fuente de divisas de Colombia se cierra. Eso obligaría al país a reducir las importaciones de manera inmediata, más o menos en US$ 15,000 millones.

Colombia entraría en un colapso de compras básicas. Y el consecuente aumento en precios de todos esos productos básicos importados. Y por supuesto en un desabastecimiento. Esos son los fenómenos que impactarían de inmediato a todo el mundo, especialmente a los pobres”.

Tarifas de transporte

“Colombia tendría que llegar a importar petróleo para refinar. Y eso generaría problemas probablemente en costos”.

Conseguir dólares para comprar petróleo

“Eso sería devastador. Eso ya lo vivimos en los años setenta y tuvo repercusiones graves en la pobreza”.

Aumento en precios del gas

“Del gas, claro que sí. Las tarifas de gas seguramente aumentarían. Tendríamos que pagar más por el gas domiciliario”.

Caída de Ecopetrol

“El valor de Ecopetrol colapsaría al siguiente día de esa decisión de Petro. Es falso que pueda sustituir su producción por energía eólica o solar, esos proyectos podrían demorar más de cinco o diez años”.

Acciones y dividendos de Ecopetrol

“Caerían las acciones y los dividendos de Ecopetrol. Recordemos que hay cerca de 300.000 familias accionistas de Ecopetrol, ellas verían afectado el valor de sus acciones y sus dividendos”.

Se ahuyenta la inversión en otros sectores

“Cuando se comienza la escogencia a dedo para castigar algunos sectores, se ahuyentaría la inversión general. Eso generaría incertidumbre. Nadie querría traer inversión a Colombia por temor. Se volvería indeseable invertir en Colombia por temor a un dedazo del presidente. Los inversionistas podrían decir, si hoy le quitan las garantías a los petroleros mañana se las pueden quitar a otro”.

Por el mismo camino de la crisis petrolera de Venezuela

“Podría ocurrirnos exactamente eso. La destrucción del petróleo y de Pedevesa en Venezuela es la perfecta imagen de lo que nos puede ocurrir a nosotros. Eso sí sería el venezolanismo, el chavismo y el madurismo juntos en Colombia. Petro está inspirado por las mismas tonterías, sandeces y necedades del régimen venezolano”.

Ecopetrol sería como Pedevesa

“Ya hemos visto cómo fue la destrucción de la gran petrolera de Venezuela por el régimen de Chávez y Maduro. Lo que seguiría es la destrucción de Ecopetrol en Colombia como ocurrió con la industria petrolera Venezuela. Es el camino más rápido a la pobreza”.