Por medio de su cuenta de Twitter, el presidente electo Gustavo Petro hizo un importante anuncio con respecto a cómo sería la metodología para la contratación de obras de vías terciarias durante su administración.
Sin dar mayores detalles, Petro anunció que las vías terciarias serán contratadas con las Juntas de Acción Comunal que operen en cada área de influencia.
“Las vías terciarias de Colombia, las que llevan a la vereda campesina, serán contratadas con las juntas de Acción Comunal campesinas”, anticipó el presidente electo.
El anuncio de Petro motivó varias respuestas entre los internautas. Mientras que algunos aplauden la intención de empoderar a las Juntas de Acción Comunal para estos asuntos, otros cuestionan si dichas organizaciones tienen la capacidad suficiente para este tipo de proyectos.
“Más eficiencia, menos costo, cero corrupción. Gran solución”, opinó el senador Gustavo Bolívar.
“Excelente. Cuando la misma comunidad realiza las obras, las hacen mejor, las cuidan y las quieren como propias. Además, el dinero de la inversión ayuda al desarrollo de cada región”; “Clave prepararlas previamente en ejecución de proyectos y certificarlas (...)”; “Presidente, ¿conoce usted los problemas organizativos tan gigantes que existen en las las juntas de acción comunal, en serio cree usted que las juntas están en la capacidad de ejecutar esas obras con eficacia y eficiencia?”, dicen algunas de las respuestas destacadas.
Critican primeras ideas de la reforma agraria que lideraría la ministra Cecilia López
Hace apenas unos días, Gustavo Petro designó a Cecilia López Montaño como su ministra de Agricultura. El pasado miércoles, 7 de julio, López fue invitada al Congreso para hablar de la reforma agraria que se presentará.
Una de las que cuestionó las declaraciones de la ministra de Agricultura fue la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático.
“Ahí está la expropiación, le dicen democratización. O producen lo suficiente para pagar los impuesto o el Estado se las compran. Obvio le descuenta lo que debe de impuestos. Robo puro y duro”, dijo.
La senadora María Fernanda Cabal, del mismo partido, se sumó a las críticas. “‘El Estado absolutista, colectivista’. El que no permite la llegada de servicios financieros del exterior para reducir tasas de interés, el mismo que no construye vías terciarias para sacar los productos del campo, el mismo que no fumiga la coca y además desarma a sus ciudadanos”, dijo Cabal.
Lo que generó la molestia de las congresistas de oposición fueron las declaraciones de López en el Congreso, al decir que la tierra en el país sufrirá un cambio y es que sería redistribuida.
“Esa es la tierra, cuyos propietarios van a tener que enfrentarse a esta realidad. O se vuelven productivos para que puedan pagar el catastro multipropósito que por primera vez va a cobrar los impuestos que no se han cobrado nunca, a estas grandes propiedades, de manera que, o lo vuelven productivo para poder pagar esto o las compra el Estado”, señaló.
López aclaró que la idea no es simplemente repartir terrenos baldíos, sino que buscarán que esa tierra que consideran improductiva y que tiene potencial de ser explotada pueda tener otros propósitos, lo que se hará bajo un modelo capitalista.
“Lo que se va a hacer es acabar con el feudalismo. Ese que en el campo ha llevado a extensiones de tierra productivas para muy pocos, para simplemente acumular riqueza entre unos pocos, para esperar que se valoricen para venderlas por metro cuadrado”, señaló López.
La ministra de Agricultura designada agregó que el propósito de esa reforma sería que Colombia pueda ser “potencia en producción agropecuaria”. El nuevo gobierno quiere que se “sustituyan” las importaciones y que se generen insumos para desarrollar esa agroindustria en el país.
“No solamente el sector agropecuario, que llegó a representar el 20 % del PIB hoy máximo llega al 8 %, sino también para sustituir esta cantidad de importaciones de productos como el maíz, por ejemplo, que nosotros podemos producir”, recalcó López en el Congreso.
La encargada de la cartera de Agricultura comentó que para ese propósito es importante lograr la paz en el país, trabajar con los campesinos y enfocarse en resolver asuntos ambientales. “Las mujeres rurales jugarán un papel crítico en la reactivación”, señaló.
López, además, reconoció que las metas del nuevo gobierno son “ambiciosas”, pero que aún así son posibles. Señaló que una de las cosas que ha faltado en el sector rural es el compromiso político, más allá de los recursos que se necesitan para sacar adelante estas reformas.
La ministra de Agricultura designada destacó el acuerdo nacional que está logrando Petro y el consenso con otros sectores, sin embargo, aún no es claro si varias bancadas estarían dispuestas a apoyar una reforma de este tipo.
“Vamos a estar en desacuerdo con sectores que tuvieron mucho poder durante mucho tiempo, con los sectores que compartieron un modelo que tenía otras prioridades, pero hagámoslo en paz”, pidió López.