La Secretaría Distrital de Salud, a la cabeza de Alejandro Gómez, ha expresado su preocupación por los constantes picos respiratorios que ha presentado la capital del país, además de expresar que los niños en los ambientes escolares son quienes más se han visto perjudicados por estos cuadros virales.

El secretario de Salud ha expresado que Bogotá está atravesando una situación de salubridad ‘preocupante’ porque no son uno ni dos, sino varios los virus que han afectado a las niñas y niños de los colegios, particularmente, contagiándose al mismo tiempo varios de ellos, lo que representa retos de carácter administrativo y de logística debido a que si no se tratan a tiempo estos cuadros respiratorios, pueden causar un elevado nivel de gravedad y morbilidad.

Gómez también explicó que la problemática de este pico respiratorio es de carácter serio, ya que los cuadros de influenza, rinovirus, adenovirus y otros tipos de virus han hecho presencia en el mismo infante, por lo que la reunión de todos estos microorganismos en un solo cuerpo produce una preocupación mayor en el niño afectado y en su círculo social.

No todo son malas noticias

Aunque la Secretaría de Salud exhorta a no bajar la guardia, se ha evidenciado por parte de las autoridades que los casos de cuadros respiratorios severos han disminuido durante las últimas semanas.

Los menores de edad en Bogotá han sufrido cuadros respiratorios graves durante el primer semestre de 2023. | Foto: Getty Images

Con base en la secretaría, esta reducción de episodios podría estar relacionada por el período vacacional en los colegios, que en la mayoría de los casos son de calendario A, por lo que hasta principios de julio se asegura que la interacción entre los menores de edad será casi nula, lo que mitiga los efectos de propagación de los virus respiratorios.

Sin embargo, frente a un inminente pico respiratorio para el segundo semestre de 2023 al regreso de los estudiantes a las instituciones educativas, se debe tener en cuenta que la vía más rápida para un contagio es la interacción social, por lo que se recomienda estar alerta a cualquier caso relacionado con gripa o resfriado para así tratar a tiempo a la persona afectada y evitar que el virus se propague por todo el plantel.

Los colegios han sido los lugares más afectados por el pico respiratorio. | Foto: Getty Images

El clima también aporta a estas epidemias

A pesar de que en Colombia no hay estaciones tan pronunciadas como en otras latitudes, la temporada seca y de lluvias ha puesto a la nación en aprietos y Bogotá no es la excepción.

Aunque se conoce que los meses de diciembre, enero, febrero, junio, julio y agosto son de predominancia seca, las lluvias no se consideran un hecho aislado, y es allí donde los virus toman impulso para propagarse gracias a los cambios bruscos del clima.

Por su parte en marzo, abril, mayo, septiembre, octubre y noviembre son las épocas del año en donde las lluvias se presentan con más regularidad en la capital colombiana, por lo que es imperativo el uso de ropa abrigadora y de la sombrilla para prevenir cuadros respiratorios graves que terminen acaparando la red de hospitales y clínicas en la ciudad.

El uso del tapabocas como medida de prevención

Sin importar que la crisis sanitaria producto del coronavirus en 2020 se haya mitigado, el tapabocas es considerado el mejor aliado para proteger a los individuos de los virus que se presentan en el ambiente y también de la contaminación que se vive en la ciudad.

Las enfermedades estacionales, como la gripa y el resfriado, son las más comunes en la temporada de lluvias. | Foto: Getty Images

A pesar de las campañas como el día sin carro y sin moto, Bogotá se ha visto obligada a enfrentar varias alertas por la mala calidad del aire y de mitigación de incendios forestales en los cerros orientales, lo que complica aún más la posibilidad de que los ciudadanos tengan una buena salud respiratoria.