El Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) solicitó a la población en general abstenerse de adquirir los productos “mezcla láctea en polvo, variedad 1. normal y variedad 2 con vitaminas y minerales” de la marca La Campesina con registro sanitario RSAJ02I20713, ya que se desconoce la ubicación de las instalaciones donde se están fabricando estos productos, y por lo tanto no es posible saber la inocuidad.
De acuerdo con la entidad, no se garantiza que el alimento no cause daño al consumidor cuando lo prepare y consuma.
Asimismo, recomendó a los consumidores que hayan adquirido los productos suspender su consumo e informar de manera inmediata al Invima, o a las Entidades Territoriales de Salud, si tiene conocimiento de lugares donde se elabore, distribuya o comercialice el producto mencionado.
Hay que señalar que la leche en polvo se obtiene de la deshidratación de la leche y generalmente se presenta en forma de polvo o gránulos.
Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la leche proporciona nutrientes esenciales y es una fuente importante de energía alimentaria, proteínas de alta calidad y grasas.
Además, la leche y los productos lácteos son alimentos ricos en nutrientes y su consumo puede hacer más diversa las dietas basadas principalmente en el consumo de vegetales.
Sin embargo, al igual que los demás tipos de alimentos, la leche y los productos lácteos pueden provocar enfermedades por factores como la contaminación y el crecimiento de patógenos, los aditivos químicos, la contaminación ambiental y la descomposición de los nutrientes que pueden afectar la calidad de la leche.
La leche puede contener microorganismos nocivos como salmonella, escherichia coli O157:H7, listeria monocytogenes, staphylococcus aureus, yersinia enterocolitica, bacillus cereus, clostridium botulinum, mycobacterium bovis, brucella abortus y brucella melitensis.
De ahí la importancia en aplicar las medidas de manipulación y conservación según sus características.
“Los peligros químicos se pueden introducir accidentalmente en la leche y los productos lácteos y transformarlos en peligrosos e inadecuados para el consumo. La leche puede contaminarse cuando los animales lecheros consumen piensos o agua que contienen sustancias químicas. Otras causas de contaminación pueden ser el control inadecuado del equipo, el entorno y las instalaciones de almacenamiento de la leche. Entre los peligros químicos cabe mencionar productos como detergentes, desinfectantes de pezones, desinfectantes lácteos, antiparasitarios, antibióticos, herbicidas, plaguicidas y funguicidas”, señaló la FAO.
Asimismo, explicó que una zoonosis es una enfermedad infecciosa que puede ser transmitida entre los animales vertebrados y los seres humanos. Las infecciones zoonóticas comúnmente asociadas al consumo de leche y productos lácteos son la tuberculosis, la brucelosis, la leptospirosis, la salmonelosis y la listeriosis.
Por su parte, los procesadores de leche producen una amplia variedad de productos lácteos como:
· La leche líquida es el producto lácteo más consumido, elaborado y comercializado.
· Las leches fermentadas se utilizan frecuentemente para fabricar otros productos lácteos.
· Los quesos se obtienen mediante la coagulación de la proteína de la leche (caseína), que se separa del suero.
· La mantequilla y el ghee (mantequilla clarificada) son productos grasos derivados de la leche.
· La leche condensada se obtiene de la eliminación parcial del agua de la leche entera o desnatada.
· Las leches evaporadas se obtienen de la eliminación parcial del agua de la leche entera o desnatada.
· La nata es la parte de la leche que es comparativamente rica en grasas; se obtiene descremando o centrifugando la leche.
· Sueros: Según FAOSTAT, el portal estadístico de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), por suero se entiende la “parte líquida de la leche que queda después de separar la leche cuajada en la fabricación del queso.
· La caseína es la principal proteína de la leche y se utiliza como ingrediente en varios productos, entre estos quesos, productos de pastelería, pinturas y colas.