En las últimas horas, la delincuencia volvió a golpear el comercio en Bogotá, en medio de la reactivación económica que se está presentando en la ciudad. Dos restaurantes fueron blanco del hampa.
En la localidad de Usaquén, un falso domiciliario de una plataforma de envío de alimentos quedó grabado en una cámara de seguridad cuando entra a un local comercial y pasa por cada una de las mesas robándoles los celulares y otros elementos de valor a los clientes.
En la imagen aparecía otro hombre en la puerta del local, sirviendo como ‘campanero’, es decir, quien está pendiente de alertar a su cómplice si hace presencia la Policía. Luego de adueñarse de las pertenencias de los clientes, los sujetos abandonan el sitio sin dejar rastro alguno. Según la Policía, por este caso se reportaron siete víctimas de hurto.
El segundo episodio se registró en el Parque de la 93, en un restaurante, donde les robaron las pertenencias a los clientes. En este caso el número de afectados fue de cinco, de acuerdo con el reporte de la Policía.
Sobre estos hechos que ahondaron la percepción de inseguridad entre algunos habitantes de la capital del país, el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, el general Eliécer Camacho, indicó que se está avanzando en la investigación conjuntamente con la Fiscalía General de la Nación.
Dijo que pronto se darán resultados contra estas estructuras que se están dedicando al hurto en la capital del país, afectando la seguridad de los capitalinos, así como se produjeron la captura del presunto responsable del homicidio de Jhonson Zorrilla, quien murió en medio de un atraco en el barrio La Estrada en la localidad de Engativá y la captura del supuesto agresor de una menor de edad en Bosa, que fue herida con un disparo cuando le querían robar el celular.
La compleja situación en Bogotá llevó a las autoridades a tomar medidas de choque para frenar la ola de inseguridad, que disparó los indicadores de tres delitos, homicidio, hurto y microtráfico.
Durante el más reciente encuentro del ministro de Defensa, Diego Molano, con alcaldes y gobernadores del país, el funcionario reconoció que hay un recrudecimiento de los delitos a nivel nacional.
“El mundo cambió después de la covid y debido a las reacciones sociales, de situación económica, pobreza y desempleo, se han incrementado la violencia y el homicidio, no solo en América Latina, sino en el mundo, y Colombia recibe esa situación; por eso reaccionamos con toda contundencia”, afirmó Molano en la cumbre de alcaldes y gobernadores.
“Nuestro propósito en común debe ser de control y contención del homicidio y protección de la vida, en coordinación de acciones conjuntas entre el Gobierno nacional, con nuestras Fuerzas Militares y especialmente con la Policía para enfrentar este reto que tenemos”, agregó.
Frente a las cifras de homicidio a nivel nacional, manifestó el ministro que entre el 28 de abril y el 20 de julio, en el marco de bloqueos y actos vandálicos, se presentaron 3.567 casos de homicidio, significando un incremento del 24 %, equivalente a 684 casos, comparado con 2019.
“Cuando se presentan los actos de vandalismo y bloqueos, tenemos un incremento en la tasa de homicidio que son atribuidos a la activación de organizaciones criminales que buscaron maximizar rentas en varios puntos del país”, aseveró Molano.
“Le apostamos al derecho de la vida en el marco de esa corresponsabilidad fundamental que permita atender esos factores que se han venido presentando”, añadió el jefe de cartera de Defensa.
En dicha cumbre, la alcaldesa Claudia López pidió que la seguridad ciudadana la conviertan en un asunto de interés prioritario.