El director de la Policía, general William René Salamanca, está dispuesto a pagar una millonaria recompensa a cambio de información que permita dar con el paradero de los delincuentes que protagonizaron un violento atentado en contra de sus uniformados.

La emergencia se presentó en la tarde de este viernes, 5 de abril, en el municipio de Piendamó (Cauca) bajo una supuesta retaliación del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc por los golpes que le ha propinado la Fuerza Pública.

Seis uniformados se desplazaban en un automotor cuando fueron abordados por los guerrilleros. En medio del hostigamiento, perdió la vida el patrullero Émerson Serrano Sánchez, oriundo del departamento del Tolima y padre de tres menores.

Los estragos del grupo armado, comandado por alias Iván Mordisco, también afectaron a cinco uniformados y a tres civiles, quienes están fuera de peligro y se recuperan de las lesiones en centros médicos de Popayán.

El general Salamanca calificó a los guerrilleros como cobardes y advirtió que las consecuencias del atentado pudieron ser mayores, dado que la pretensión de las disidencias de las Farc era afectar contundentemente a las comunidades.

“Gracias al heroísmo de nuestros policías, evitamos muertos de la población civil. Estos cobardes intentaron atacar el hospital de Piendamó, eso lo vamos a denunciar”, manifestó el alto mando de la institución este sábado.

Un nuevo hecho de violencia acabó con la vida del uniformado. | Foto: Captura de video / Policía Nacional

Ahora bien, la Policía dispondrá de cien millones para acelerar el proceso de investigación. Ese dinero se le entregará a la persona que brinde información certera sobre el paradero de los responsables y su respectiva judicialización.

Al pacer, los implicados están enfilados en el bloque occidental del Estado Mayor Central de las Farc, quienes fueron descobijados con el cese al fuego por las constantes violaciones y ahora enfrentan sin frenos a la Fuerza Pública.

Este ataque se registró tan solo horas después de las emergencias presentadas en Cali, Jamundí, Suárez, Cajibío y Tumaco. En esos territorios, el estruendo de las balas y los explosivos tiene atemorizada a la población civil.

El primer incidente ocurrió en plena zona urbana de la capital del Valle a altas horas de la noche de este 4 de abril: “Miembros del grupo armado residual de las Farc, de manera demencial, detonaron un vehículo cargado con un sistema artesanal de lanzamiento de cilindros enfrente de la muralla del cantón militar de Pichincha”.

Minutos más tarde cayó una granada en la sede del Gaula Militar del municipio de Tumaco, Nariño. En medio de la exposición, un infante de Marina resultó herido por las esquirlas. De manera preliminar, se reveló que el artefacto fue lanzado por un sujeto desde una motocicleta y se estudia si tiene relación con las disidencias.

En la madrugada del viernes se confirmó un hostigamiento a las instalaciones de la Policía Nacional en el municipio de Cajibío, Cauca, por parte del Estado Mayor Central. En esa misma zona, hubo confrontaciones con las tropas del Ejército Nacional que, de momento, no deja afectaciones en la población.

Disidencias de las Farc. (Imagen de referencia). | Foto: AFP

Además, en ese mismo departamento, pero en la zona rural de Suárez, el grupo armado lanzó disparos hacia la base militar La Salvajina. La institución indicó que no hubo personal herido y se logró retomar el control del orden público. Nuevamente, los responsables serían los miembros de la estructura ‘Jaime Martínez’.