Para el próximo 19 de junio quedó programada la audiencia en la cual la Fiscalía General acusará al coronel Carlos Alberto Feria por su presunta participación en la prueba de polígrafo a la que fue sometida Marelbys Meza en enero de 2023 en la Casa Galán, ubicada en inmediaciones a la Casa de Nariño, en el centro de Bogotá.
La audiencia se programó en el centro de servicios judiciales de Paloquemao, pese a que, en la actualidad, la Corte Constitucional estudia un conflicto de competencias elevado por la Justicia Penal Militar, que reclamó el expediente por considerar que los hechos materia de investigación se pueden catalogar como “actos de servicio”.
“Esta conducta debe ser reclamada por la jurisdicción penal militar, por cuanto cumple con los presupuestos objetivo y funcional para indicar que estas personas no solamente eran miembros de la fuerza pública en servicio activo cuando cometieron estas conductas que le fueron indilgadas, sino que tenían un vínculo estrecho y directo con el servicio”, precisó el juez penal militar el pasado 18 de marzo.
Según el juez, el hecho de que se reclamara el conocimiento de este caso no puede catalogarse como un salto a la impunidad, pues en esta jurisdicción especial se investiga, juzga y sanciona teniendo en cuenta las pruebas recolectadas. “No es un velo de ocultamiento, pues la jurisdicción penal militar es transparente e imparte eficaz justicia”.
Sin embargo, la Fiscalía General se mostró en desacuerdo con el reclamo del expediente, por lo que pidió que el caso siga en conocimiento de la justicia ordinaria. La Corte Constitucional tiene la última palabra, por lo que no se descarta que la audiencia de acusación tenga que ser reprogramada hasta que no se conozca una decisión final.
El coronel Carlos Feria tendrá que responder en juicio por delitos de peculado por uso, abuso de función pública y constreñimiento ilegal. La Fiscalía General sostiene que coordinó y dirigió la retención de Marelbys Meza en la tarde del 29 de enero de 2023 y su traslado en carros de la Policía a la Casa Galán, para realizarle una prueba de polígrafo.
Esto, después que fuera denunciada por robarse una maleta que estaba del apartamento de Laura Sarabia que contenía dinero en efectivo y documentos oficiales de la Presidencia de la República. Pese a que no era funcionaria pública, como reclamó la Fiscalía General, la niñera fue sometida a esta prueba sin que existiera una orden judicial.
El pasado 28 de noviembre, la Fiscalía General le imputó al coronel Feria los delitos de peculado por uso, abuso de la función pública y constreñimiento. Tras la pregunta de la jueza 79 de control de garantías, el oficial de la Policía se declaró inocente.
“Usted (coronel Feria) estuvo al frente y dispuso las acciones encaminadas a contactar el organismo investigativo y adelantar así las indagaciones (...). Permitió el uso de los equipos de poligrafía de uso irregular, ya que estos son destinados para el estudio de seguridad de funcionarios o empleados que van a ingresar al servicio de la jefatura”, reseñó el fiscal del caso.
“Esta situación implicó un desmedro en la voluntad de Meza, ya que, por la necesidad de preservar su trabajo y demostrar su inocencia, toleró acudir a tal convocatoria, y así se materializó la vulneración de la autonomía, que incluso manifestó su sentimiento de inferioridad ante el poder de su empleadora, pues no se opone a someterse a la prueba contestando las preguntas e incluso llegando a soportar que le arrebataran su celular cuando lo tenía desbloqueado”.