“Soy un perseguido de quienes perseguí”. Estas palabras las usó el general (r.) Miguel Maza Márquez, exdirector del DAS, desde el comienzo del proceso en su contra por el asesinato de Luis Carlos Galán. Y fueron las últimas que pronunció cuando terminó el juicio en la Corte Suprema de Justicia.A partir de ese momento, el caso por el asesinato cometido en la Plaza de Soacha, que sacudió al país entero, entró en su recta final en el máximo tribunal de lo penal. Después de 27 años, la Corte se prepara para emitir fallo definitivo que cierre el capítulo del magnicidio del 18 de agosto de 1989.La Fiscalía y la Procuraduría pidieron su condena. Para el ente investigador, Maza fue una ficha clave en la alianza entre paramilitares, narcotraficantes y agentes del Estado, quienes planearon y ejecutaron el crimen de Galán.El ente investigador lo responsabiliza de debilitar el esquema de seguridad del entonces candidato presidencial con el fin de que sicarios pudieran asesinarlo. La orden habría sido impartida por el excongresista Alberto Santofimio, condenado a 24 años de prisión por la misma Corte Suprema.Para la Fiscalía, Maza Márquez nombró al oficial de la Policía Manuel Torregrosa jefe de escoltas de Galán, a pesar de que no tenía la experiencia necesaria para cuidar a uno de los hombres más amenazados del país. “Torregrosa fue uno de los cómplices de Maza Márquez en el DAS para ejecutar a Galán”, sostiene la Fiscalía; Torreglosa murió en el 2009 sin ser procesado.Tanto la Fiscalía como la Procuraduría consideran que Maza Márquez es culpable del delito de concierto para delinquir, pues supuestamente se asoció con comandantes paramilitares como Henry de Jesús Pérez para planear el asesinato de Luis Carlos Galán. Y cuestionan que hubo una desviación de la investigación para no dar con los verdaderos responsables.Según el Ministerio Público, el exdirector del DAS puso en contacto al asesino de Galán, Jaime Eduardo Rueda Rocha, con el jefe de seguridad, Jacobo Torreglosa. "Maza Márquez sabía que si asesinaba a Galán no sólo complacía a sus amigos políticos sino que recibía el dinero para sus fines políticos", indicó la Procuraduría durante el juicio.La Procuraduría le dio credibilidad al testimonio de Héctor Ernesto Muñoz, alias la ‘Bruja‘, quien desde Perú dio una declaración diciendo que avisó, 10 días antes del crimen, que iban a asesinar a Galán. Dijo que no sólo no se tomaron medidas sino que fue amenazado con que le pasaría lo mismo que a Orlando Monroy Rivera, alias ‘Trapero‘, hoy desaparecido. La amenaza, aseguró, la recibió de su jefe inmediato Bernardo Álvarez, cuñado de Maza Márquez.La ponencia del caso la tiene el magistrado Fernando Castro, quien pide una pena de 30 contra el exoficial que pasó de ser el enemigo número uno de la mafia, al banquillo de los acusados como cómplice y responsable del magnicidio de Galán.