Parece una historia de nunca acabar. Desde hace varios años el Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) se ha convertido en una verdadera papa caliente para el Gobierno de turno por las constantes irregularidades, fiestas, salidas sin permiso y hasta fugas parecen no tener un control.
El más reciente hecho se presentó en la cárcel La Picota de Bogotá, donde se registró una fiesta que duró siete días y contó con trago, reconocidos cantantes vallenatos y de música popular, y muchísima comida.
Tras la polémica, el nuevo director del Inpec, coronel Daniel Fernando Gutiérrez anunció medidas de fondo con el fin que estos hechos no se vuelvan a presentar. Igualmente, le solicitó a la Fiscalía y a la Procuraduría General adelantar una investigación de fondo para identificar a los responsables de permitir el ingreso.
“Estanos trabajando para dar con las personas vinculadas con este acto”, precisó, por su parte, el recién posesionado director de La Picota, dragoneante Horacio Bustamante Reyes.
En la investigación preliminar se ha podido confirmar que existen falencias en la estructura de La Picota, entre estos, la existencia de “huecos por donde están ingresando elementos” totalmente ilegales.
En este punto se quiere establecer si los guardias tenían conocimiento de esto y fueron cómplices para el ingreso de estos elementos a la fiesta que se celebró.
“Tenemos unos privados de la libertad que no tienen candados y que deambulan por su fase de seguridad y que tienen ese privilegio en ciertas áreas (...) ahí tenemos unas falencias que ayer diagnosticamos”. afirmó el director de La Picota.
En un primer diagnóstico detectó que existen caletas en las que los reclusos que están en el pabellón de extraditables, guardan elementos prohibidos como sustancias restringidas, licores importados, dinero y demás.
También dijo que los barrios que están ubicados en la parte alta de la cárcel, estarían lanzando elementos prohibidos a los reclusos.
El hueco que encontraron tiene una extensión cercana a los 900 metros por donde también estarían ingresando los excéntricos elementos que son usados para el esparcimiento de los que están siendo requeridos en extradición.
En los videos revelados por SEMANA se observa incluso una parranda vallenata, botellas de whisky y aguardiente, como si se tratara de un club y no de un centro carcelario de máxima seguridad
El organismo de control disciplinario ya pidió revisar la investigación que adelanta la Fiscalía General de la Nación “con el fin de obtener todas aquellas pruebas o evidencias que ayude a la plena identificación o individualización de los presuntos miembros del INPEC comprometidos en estos hechos”.
De igual manera, se practicará “Inspección disciplinaria” al proceso disciplinario que se adelanta en la Oficina de Control Interno Disciplinario del INPEC, con el fin de obtener todas aquellas pruebas o evidencias que ayude a la plena identificación o individualización de los presuntos miembros del INPEC comprometidos en estos hechos.
Transformación de La Picota
El dragoneante Horacio Bustamante, quien fue designado recientemente como director de La Picota, anunció varias medidas para transformar el centro carcelario. “Haremos un plan de desarme, fortalecemos la humanización y respetar los Derechos Humanos”.
Igualmente, le hizo un llamado a todos los funcionarios, trabajadores, personas privadas de la libertad y fundaciones que trabajan con la población carcelaria “con el objetivo de trabajar mancomunadamente para la puesta en marcha del plan transparencia”.
Po su parte, el director del Inpec manifestó la necesidad de hacer un cambio estructural, por lo que le dio la bendición al dragoneante Horacio Bustamente a quien calificó la persona idónea y calificada para trabajar por el bienes y seguridad de los privados de la libertad.