En exclusiva para SEMANA, un testigo que habló con el coronel Óscar Dávila horas antes de su muerte el pasado viernes, reveló detalles que comprometen directamente al gobierno del presidente Gustavo Petro. La identidad de la fuente se mantendrá en confidencialidad para proteger su vida.
Dicho testigo contó detalles de todo lo que ha sucedido alrededor del deceso del uniformado, que era la persona clave en la prueba de polígrafo que se le hizo a Marelbys Meza, la exniñera de Laura Sarabia, saliente jefe de gabinete del actual mandatario. En este relato, el abogado Miguel Ángel del Río es el protagonista.
Según su relato, la clave del escándalo está en el dinero perdido en la casa de Laura Sarabia, exjefe de gabinete. “La plata era de Petro, eran cinco maletas y 3.000 millones de pesos”, dijo.
“Dávila me dijo que Petro mandó a Laura a guardarle la plata en el apartamento; ese dinero se perdió, entonces necesitaban que apareciera antes de tener que informarle al presidente que se había perdido”, agregó.
Por eso, la fuente no dudó en afirmar que: “Por debajo de cuerda, todo se estaba haciendo de manera ilegal”.
Por esa razón, según la fuente, se desató una operación ilegal con el fin de recuperar la millonaria suma a como diera lugar. En estos hechos, de acuerdo con el testimonio, participó directamente el coronel Dávila, pero no habría actuado solo.
“A él (el coronel Dávila) lo contacta el coronel (Carlos) Feria (jefe de Casa Militar de la Presidencia) porque, cuando se sabe lo del monto del dinero, Laura (Sarabia) llama a Feria, y Feria contacta a Óscar (Dávila) y él empieza a hacer todas las actividades. Lo primero que hacen es empezar a hacer las pruebas de poligrafía, pero no se lo hacen a la empleada sino a la teniente”, dijo la fuente, en referencia a la teniente Laura Luna.
Además, indicó que le hicieron polígrafo a todo el esquema de seguridad de Sarabia.
“Entonces a la primera que tratan de culpar es a ella (a la teniente), le hacen la prueba de polígrafo, presenta el polígrafo, no tiene ningún problema, en la prueba la presionan y dicen que ella es la que tiene que responder y ella dice no va a responder por nada de eso. Ahí empieza a hablarse ya de un monto de 3.000 millones de pesos”, sostuvo la fuente.
Fue después de todo eso que se tomó la decisión de someter al polígrafo a Marelbys Meza, la exniñera del hijo de Sarabia.
“Ahí ya dicen que la empleada es la culpable. Lo que él (Dávila) nos dice es que de eso se recuperaron 268 millones de pesos. Y los entrega el esposo o la pareja permanente o el compañero de la empleada del servicio. A él lo cogen en el ámbito de la Policía, dice que lo levantan, lo aprietan, todo eso, y él entrega ese dinero”, relató la fuente.
“Había que recuperar un dinero que se había perdido y tocaba hacerlo y la señora (Marelbys) accedió voluntariamente. Se hizo con recursos públicos, con una persona que no era funcionaria, ese fue el primer error”. Frente a los insultos a la exniñera en el polígrafo, dijo: “Sí, eso hace parte normal de la presión que se ejerce para sacarle la verdad al máximo. Si ella pierde el polígrafo, eso se reafirma más y se genera ese tipo de presión”.
Los hechos habrían ido más allá. Según el testigo, el coronel Dávila le contó que él mismo le entregó personalmente a Sarabia, en sus manos, una maleta con los 268 millones de pesos recuperados.
“El coronel Feria sabía todo y, por obvias razones, Laura Sarabia, porque los 268 millones de pesos se los entregó (Dávila) personalmente a ella”, agregó la fuente.
Debido a la gravedad de los hechos, y siendo Dávila uno de los principales protagonistas, es cuando entra Miguel Ángel del Río a asumir la defensa del coronel. El letrado recibió del policía, en efectivo, 50 millones de pesos.
El testigo reveló que el coronel Dávila estaba preocupado. “La angustia que él tenía era que ya se estaba empezando a saber cositas y todo iba a empezar a desencadenarse directamente sobre él. Finalmente el que realizó la mayoría de las cosas fue él, pero a él no lo contactaron directamente, lo contacta el coronel Feria”, contó la fuente.