Tras la fuga masiva de al menos 73 caimanes de la especie Crocodylus acutus, ocurrida en la Estación Experimental Crocrodylia, ubicada en el corregimiento La Florida de San Marcos, Sucre, la Procuraduría General de la Nación ha solicitado de manera urgente a la Corporación para el Desarrollo Sostenible de La Mojana y el San Jorge, así como al alcalde del municipio, Arnulfo Ortega, que entreguen un informe detallado sobre la situación y las medidas adoptadas.

El incidente, que se produjo a raíz del colapso de las piletas en la estación experimental, ocurrió tras las intensas lluvias del 28 de octubre, según los reportes oficiales. Como resultado, los caimanes, que tienen una longitud de entre 1.5 y 1.7 metros, lograron escapar de las instalaciones, lo que ha generado una emergencia ambiental en la región.

La fuga de estos reptiles representa un peligro considerable tanto para las comunidades cercanas como para los ecosistemas de la zona. De acuerdo con el informe de la Procuraduría, algunos de los caimanes podrían haber llegado a la ciénaga de La Florida, lo que aumenta la preocupación por la seguridad de la población local. La presencia de estos animales en un entorno tan cercano a áreas habitadas y ecosistemas frágiles plantea serios riesgos, no solo para los residentes de la zona, sino también para la fauna y flora del lugar.

El organismo de control ha requerido a las autoridades locales y regionales que presenten un informe exhaustivo sobre las condiciones de la infraestructura de la Estación Experimental Crocrodylia, en especial en cuanto a su capacidad para garantizar la seguridad de los animales y las personas. Además, se ha solicitado un análisis detallado de las acciones de contención que se implementaron tras la fuga, así como los protocolos de emergencia establecidos para situaciones como esta.

La Procuraduría también ha solicitado información sobre los operativos de búsqueda y captura de los caimanes, así como sobre las campañas de prevención y los procedimientos de seguridad aplicados en las áreas donde podría haber presencia de estos reptiles.

La fuga de los caimanes no solo ha causado alarma localmente, sino que ha sido ampliamente reportada por medios de comunicación, que han resaltado los riesgos que esto representa tanto para la seguridad pública como para la biodiversidad de la región. En otros portales informativos se ha mencionado que este tipo de incidentes, aunque no son comunes, han sucedido en otras partes del país debido a fallos en el manejo de animales en cautiverio, lo que hace aún más urgente la revisión de las políticas y protocolos de seguridad en las estaciones experimentales.

La Procuraduría 19 Judicial II Ambiental y Agraria de Sincelejo, quien lidera la investigación, subrayó que se deben tomar medidas inmediatas para garantizar tanto la seguridad de la población como la protección de los ecosistemas afectados. “Es fundamental que las autoridades locales actúen de manera efectiva y rápida para mitigar los riesgos que esta fuga representa”, señaló la procuradora encargada.

Por su parte, el alcalde Arnulfo Ortega, en contacto con los medios locales, se comprometió a colaborar con las autoridades ambientales para asegurar que los caimanes sean localizados y devueltos a su hábitat adecuado, a la vez que se toman acciones preventivas para evitar incidentes similares en el futuro.