La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, se pronunció acerca de la reunión del Gobierno nacional con el consorcio encargado del Metro en la capital desarrollada semanas atrás. La tarde de este 27 de octubre agradeció al ministro de Transporte, Guillermo Reyes, descartar la intención de cambiar los contratos.

En su cuenta en Twitter, la mandataria afirmó que generar incertidumbre sobre quizá la obra más importante de Bogotá en esta década hubiera afectado los mercados y, por ende, la cotización en el precio del dólar en Colombia.

“Agradezco al ministro de Transporte por haber dado claridad respecto a los contratos del Metro de Bogotá. Lo único que haría falta para desestabilizar aún más la tasa de cambio y la economía sería sugerir que se van a deshonrar los contratos con la banca y los concesionarios”, expuso Claudia López.

El comentario de la alcaldesa tuvo que ver con que, si bien el ministro de Transporte reconoció la reunión con el presidente del consorcio China Harbour Engineering y Xi’An Metro, explicó a algunos medios que la intención no fue dar un reversazo a lo contratado: que la primera línea del Metro fuera elevada.

“Presidí la junta del Metro de Bogotá y les pregunté expresamente a los 3 delegados del Gobierno nacional si estaban solicitando una modificación del contrato de la primera línea del metro y me dijeron que no, lo cual coincide con la aclaración pública del MinTransporte”, agregó la alcaldesa.

Eso sí, en el Congreso de Autoridades de Tránsito realizado una semana atrás en Cartagena, el ministro Reyes sugirió, “no como una orden”, contemplar que una parte del trazado en la Avenida Caracas fuera subterránea.

El primer vagón se expondrá en el parque Simón Bolívar

El primer vagón del Metro, que llegó a Barranquilla desde China, estaría en la capital del país en diciembre. De acuerdo con Claudia López y con su jefe de gabinete, Antonio Sanguino, la intención es que la ciudadanía pueda contemplarlo frente al Parque Metropolitano Simón Bolívar, donde también se aprovechará para hacer pedagogía en torno a este medio de transporte.

De color verde, aunque lo contemplado por el exalcalde Enrique Peñalosa es que fuera rojo, el Metro operaría a 42 km/h y, con sus seis vagones, tendría la capacidad de transportar a 1.800 usuarios del sistema de transporte, según la Empresa Metro de Bogotá.

La alerta que generó el Centro Democrático

Quien alarmó acerca de la posibilidad de que el presidente Gustavo Petro pidiera que la primera línea del Metro fuera subterránea, como lo propuso durante su administración de Bogotá, fue el concejal Óscar Ramírez, del Centro Democrático, el 25 de octubre.

“El presidente Petro no nos puede devolver a discusiones del año 2017. Hoy, la primera línea del Metro de Bogotá tiene un avance físico del 16 %. Lo que la ciudadanía necesita con urgencia es que el proyecto esté listo en el menor tiempo posible”, expuso. Y agregó: “Si el presidente quiere renegociar los contratos, esto traería retrasos y Bogotá podría pasar esta década sin Metro, pues se correría la fecha de inicio de operaciones, hoy contemplada para el año 2028″.

Debido a la alerta, también reaccionó la senadora Paloma Valencia, citando el artículo periodístico de La Silla Vacía en el que se advirtió la reunión del gobierno Petro con el consorcio a cargo del Metro, en la que al parecer no participó ningún representante de la Alcaldía de Bogotá.

“El mejor metro es el que se hace. El metro elevado de Medellín es una maravilla. La segunda línea será subterránea. El presidente Duque dejó garantizadas las vigencias futuras, ¿el presidente Petro va a incumplir? No más caprichos en el gobierno”, publicó en su cuenta en Twitter.

Y agregó que el presidente “Petro no construye”, sino que “solo está preso de sus caprichos”, exigiéndole no cambiar lo pactado para sacar adelante el Metro de Bogotá.