La Defensoría del Pueblo lanzó una alerta este miércoles por los niveles bajos del río Amazonas y sus implicaciones humanitarias. La entidad hizo un llamado a las autoridades locales y departamentales, así como a las comunidades, a tomar las medidas necesarias para reducir la vulnerabilidad ante la ocurrencia de este fenómeno de sequía y desabastecimiento de agua.

Ante la sequía provocada por los bajos niveles del río Amazonas y sus afluentes, que se viene presentando desde mediados del mes de agosto según reportes del Ideam, la Defensoría del Pueblo adelanta acompañamiento a las comunidades ribereñas para la garantía del derecho a la prevención y atención de desastres.

La entidad, sin dejar de lado eventos adyacentes a este fenómeno como el desabastecimiento de agua, que en su agudización podría repercutir en la seguridad alimentaria de la población y también la ocurrencia de incendios de cobertura vegetal, ha hecho un llamado a las autoridades locales, regionales y nacionales para que implementen desde ya medidas que garanticen el bienestar de las poblaciones de la zona.

Bajos niveles del río Amazonas (Foto: Defensoría del Pueblo) | Foto: Defensoría del Pueblo

Es claro que la Amazonía colombiana es considerada una de las regiones más biodiversas y vulnerables del planeta, la cual experimenta una variabilidad climática que, en la actualidad, se ha visto fuertemente influenciada por diversos factores naturales y antrópicos. Además de los efectos del cambio climático y el calentamiento global, tanto a nivel local como global, debido al aumento de las temperaturas y las actividades de deforestación, es necesario que las autoridades ambientales activen las alertas para atender oportunamente esta problemática.

A pesar de su gran extensión, esta región presenta una baja densidad poblacional, concentrada principalmente en las riberas de los ríos y en pequeñas ciudades. Es importante destacar que esta población ha vivido en condiciones de vulnerabilidad a lo largo del tiempo, lo que ha puesto a prueba sus capacidades para enfrentar y recuperarse de diversas emergencias.

Por esta razón, “la entidad hace un llamado urgente a todos los organismos de carácter nacional, regional y local con responsabilidades en la gestión del riesgo de desastres para que se implementen medidas de reducción del riesgo y atención de emergencias, así como actualizar los planes de gestión y estrategias ante los posibles impactos y vulneraciones de los derechos de las comunidades en el territorio nacional”, subrayó la Defensoría a través de un comunicado.

Por su parte, las autoridades locales de los municipios de Leticia y Puerto Nariño, en respuesta a la temporada seca y la afectación generada por disminución del cauce de los ríos y cuerpos de agua, han decretado la alerta amarilla y la existencia de la situación de calamidad pública en los asentamientos urbanos, rurales y ecosistemas amazónicos respectivamente.

Además, en estas declaraciones se han indicado las acciones a realizar a cargo de los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo y Desastres (CMGRD) de estos municipios y de las demás entidades de orden municipal, departamental y nacional que así se requiera.