El jueves pasado, durante el Banquete del Millón, el presidente, Iván Duque, expuso un discurso en el que insistió que los credos no se pueden politizar, menos aún cuando el país atraviesa por una situación difícil, y aprovechó para defender su fe en la Virgen de Chiquinquirá.
Todo sin referirse directamente a la polémica en la que estuvo hace algunos meses debido a un trino que publicó en su cuenta en la que nombraba a ese símbolo religioso, lo que despertó un álgido debate judicial.
“Cuando decretamos el aislamiento preventivo obligatorio yo hablaba de eso con Marta Lucía [Ramírez, la vicepresidente] y yo le decía: ningún presidente ha tenido que tomar una decisión con tantas implicaciones”, dijo recordando cuando en marzo tuvo que imponer la cuarentena estricta en todo el territorio nacional. “Yo soy un hombre de fe, orgullosamente de fe, respeto la libertad religiosa y los credos… soy devoto de Dios, temeroso de Dios y tengo una fe que he expresado sin vanidades y sin buscar aplausos por nuestra patrona de Colombia, la virgen de Chiquinquirá”.
“Ese día [en el que decretó el aislamiento] me senté a orar y yo le decía a Dios: ‘dame toda la sabiduría, dame toda la fuerza’. Llevábamos los meses de enero y febrero creciendo por encima del 4% y de repente nos encontrábamos con la pandemia de frente, pero las decisiones se tenían que tomar para prevenir una tragedia, prevenir una muerte masiva por contagios de proporciones realmente inimaginables”.
Durante su discurso, el presidente de la República aseguró que en esos momentos tan difíciles, cuando decretaron el aislamiento obligatorio, él estaba convencido de que la pandemia se podría combatir con la solidaridad de los colombianos.
“Ahí estuvo la fortaleza y la fe. Todos los días la invoco [a la virgen de Chiquinquirá] y recuerdo que esa noche cuando salimos con Marta Lucía y con nuestro equipo de salud a dar la alocución presidencial. Ese día yo le hacía un llamado a la sociedad colombiana, el coronavirus es una enfermedad que crece de las imperfecciones humanas, crece en la falta de solidaridad”, dijo el primer mandatario.
La discusión por las creencias del presidente de la república Iván Duque llegó incluso a los estrados judiciales, luego de que se radicara una tutela para exigirle retirar algunas publicaciones de sus redes sociales que hacían mención a la virgen de Chiquinquirá en un país considerado laico.
Aunque el Gobierno perdió el primer round en esa batalla jurídica, la tutela se impugnó y en segunda instancia le defendieron, desde la justicia, el derecho que tiene el primer mandatario a mantener y creer en sus convicciones religiosas.