La operación militar planeada por comandos especiales estaba dirigida contra Luis Gabriel Zea Bernal, cabecilla de la del Frente José Antonio Galán del ELN, quien contaba con una trayectoria criminal de 13 años, aproximadamente. Alias Visaje era uno de los presuntos cabecillas de la guerrilla en los departamentos de Bolívar y Antioquia.
Este sujeto se encontraba, de acuerdo con información de inteligencia de la Policía, en la vereda Mina Nueva del municipio de Santa Rosa Sur, en Bolívar, hasta donde llegaron fuerzas élite de distintas unidades de la fuerza pública.
Las autoridades le atribuyen varias acciones contra la fuerza pública desde el 2021, en las regiones de Segovia y Remedios. Dentro de sus acciones delictivas los señalan de encabezar extorsiones, minería ilegal y narcotráfico. Así como reclutamiento de menores de edad.
La muerte de este cabecilla del ELN se da luego de que el Gobierno y el ELN culminaran una reunión extraordinaria para buscar un punto de acuerdo, tras la discordia que se dio entre las partes por el fallido cese al fuego bilateral decretado por el presidente Gustavo Petro.
Es de recordar que el Gobierno había decretado un cese de operaciones militares y de policía contra cinco estructuras criminales en búsqueda de la política de ‘paz total’.
Las estructuras son: disidencias de las Farc, Segunda Marquetalia, Los Pachenca y el Clan del Golfo, en dicho paquete también había entrado el ELN, pero la guerrilla luego desmintió al presidente Gustavo Petro e indicó que no había pactado ninguna tregua con el Estado.
Diálogos con el ELN
Las delegaciones de paz del Gobierno y el ELN se reunieron por cuatro días en Caracas (Venezuela) para superar unas diferencias que se presentaron por cuenta del anuncio del presidente Gustavo Petro sobre un cese bilateral al fuego con esa guerrilla.
El anuncio que hizo el mandatario el 31 de diciembre de 2022 no cayó bien en el ELN y a los dos días fue desmentido por el Comando Central. Aunque los negociadores del Ejecutivo quisieron mantener la prudencia ante lo sucedido, los guerrilleros hablaron abiertamente de una crisis en la mesa de diálogo.
Por esa razón, se convocó a una reunión extraordinaria donde los negociadores de las dos delegaciones hablaron sobre lo ocurrido y pactaron que la información se debe entregar al país de manera conjunta o como se acuerde en la mesa de diálogo.
Esto significa que las partes superaron la crisis y continuarán ajustando la agenda de diálogo con la finalidad de continuar negociando. ”Apreciamos la voluntad de las partes con miras a superar las diferencias que se presentaron recientemente, saludamos la decisión de las partes para sacar adelante lo acordado. Ratificamos a las partes el compromiso como país garante para que el proceso sea exitoso”, dijo el garante de Venezuela, Carlos Martínez.
Después del encuentro, quedó claro que el siguiente ciclo de paz se hará en México e iniciará el 13 de febrero, donde las partes abordarán el tema del cese al fuego bilateral. No se descarta que antes de terminar ese mes haya un anuncio oficial en esa materia.
Además, se mantendrán los procesos de comunicación que se crearon en diciembre de 2022 para que esos canales sean los encargados de transmitir la información a los colombianos y evitar episodios como los ocurridos con el presidente Petro.
Otro de los acuerdos es que debe existir siempre la bilateralidad para evitar inconvenientes o diferencias entre las partes y la toma de cualquier decisión debe pasar primero por la mesa de diálogo.
En las reuniones estuvieron los delegados de Venezuela, Cuba, Chile, México, Noruega, la ONU y la Iglesia católica, que siempre acompañan los procesos de diálogo entre las delegaciones de paz.
Justamente, Hellietta González, delegada de México, dijo que su país está presto a recibir a las delegaciones y que el Gobierno tiene toda la voluntad de cooperar con la paz de Colombia. “Se hará un examen conjunto de los logros y dificultades en la implementación de los acuerdos del primer ciclo”, dijo la representante del Gobierno mexicano.
Monseñor Héctor Fabio Henao, delegado de la Iglesia católica para los diálogos de paz, indicó que el compromiso de las delegaciones de paz es fundamental para conseguir los objetivos finales por lo que este tipo de diferencias serán normales a lo largo de la negociación. Desde la Casona Cultural de Caracas (Venezuela), el alto prelado señaló que ahora la aplicación de alivios humanitarios será otra de las prioridades de las partes.
El acompañamiento internacional también quedó pactado en esta reunión y así lo demostró Carlos Ruiz Massieu, representante de la ONU, quien dio un espaldarazo a los anuncios de las delegaciones.
“Celebramos compromiso de las partes con fortalecimiento de la Mesa y la construcción de paz. Delegación @infopresidencia y @DelegacionEln demostraron una vez más que el diálogo es la forma de avanzar. Reitero voluntad de apoyo del secretario general @antonioguterres al proceso”.
El senador Iván Cepeda, que es negociador del Gobierno del presidente Gustavo Petro, contó que se revisará la agenda de diálogo que se firmó en 2016 durante el mandato de Juan Manuel Santos, para actualizarla y continuar con la negociación.
“Ha salido fortalecido el proceso y la mesa de diálogo de paz. Las delegaciones están listas para iniciar el segundo ciclo de paz y este encuentro ha sido un éxito”.
La delegación del Gobierno volverá a Colombia, donde trabajará por separado, y la del ELN se reunirá con integrantes del Comando Central en lugares desconocidos, con la finalidad de ajustar las temáticas del siguiente ciclo de paz.
Por ahora, Antonio García, jefe del ELN y uno de los críticos de la ‘paz total’, no se ha pronunciado sobre estos acuerdos de las partes.