Como SEMANA anticipó en primicia, la Corte Suprema de Justicia negó la recusación que presentó la defensa del senador Armando Benedetti contra la magistrada Cristina Lombana en medio de la investigación que se adelanta contra el congresista por presunto enriquecimiento ilícito. Justamente, tras esa revelación, ahora se conoce la fecha de indagatoria a la que deberá asistir Benedetti. La fecha quedó para el próximo 29 de junio a las 8 de la mañana.
Un dato curioso es que la indagatoria será en la sede centro de la Corte, en el Palacio de Justicia en Bogotá, donde se llevó a cabo la indagatoria del expresidente Uribe y no en la sede norte, en la calle 72, que es donde funciona la Sala de Instrucción.
Es importante recordar que el congresista Armando Benedetti afronta una de las investigaciones más polémicas en su carrera política. Cristina Lombana, magistrada de la Corte Suprema, de la Sala de Instrucción, lo citó a indagatoria ya, en medio de señalamientos contra el congresista por presunto enriquecimiento ilícito.
En este caso, las dudas o sospechas de la Corte surgen porque conforme a la declaración de renta que realizó el parlamentario ante la DIAN deja claro que su única actividad económica y sus recursos provienen solo de su labor como senador, y al cruzarlos con sus gastos, inversiones, compras y lujos en sus tarjetas de crédito, las cuentas no cuadrarían.
En días pasados, SEMANA reveló en exclusiva, el informe en poder de la Fiscalía que hace parte de los elementos probatorios que tiene la Corte en contra del Congresista para haberlo llamado a indagatoria.
El senador Benedetti se ha defendido explicando que todo obedece a una especie de persecución: “No le ha bastado con ordenar la investigación de más de 200 personas cercanas a mí, las cuales, sobra decir, ni siquiera son aforadas y desde hace mucho tiempo no tienen ningún tipo de relación conmigo; tampoco haber escuchado a más de 100 testigos a los que reiteradamente les ha preguntado por mí sin obtener ningún resultado; menos le ha sido suficiente con involucrarse en mi labor legislativa llegando incluso a preguntar sobre cuestiones de mero trámite completamente ajenas a mí como de por qué se me designó ponente de un proyecto de ley o, peor, aprovechar una denuncia interpuesta por el cuestionado Jaime Lombana para abrirme siete procesos sin ningún sustento jurídico”, explicó el congresista cuando se conoció la apertura de investigación en su contra y el llamado a indagatoria.
Uno de los apartes del informe señala, por ejemplo que en 2002, a Benedetti le ingresaron 134 millones de pesos, y el saldo final fue de poco más de 21 millones. Pero, en 2018, sus cuentas reportan un ingreso superior a 1.075 millones de pesos, casi el doble de lo que devenga un congresista en todo el año de trabajo. El saldo fue de 1.216 millones. Este incremento, por ejemplo, deberá explicarlo ante la Corte Suprema.
El senador tiene también reportado en la Dian que su única actividad económica es la de congresista, por lo que las autoridades no entienden de dónde sale el dinero sobrante. La Corte tiene otras dudas sobre las cuentas bancarias que Benedetti manejaría en Estados Unidos.
En días pasados, precisamente cuando se conoció el informe, la defensa del senador Armando Benedetti, en cabeza del abogado Miguel Ángel del Río, explicó que la Corte pareciera no tener en cuenta el ingreso por reposición de votos, y que también le entró plata por la venta de un apartamento, y que todo eso se debería tener en cuenta.